Cadena de la vida en Semana Santa: "Cuanto más rápida es la primera intervención mejor el resultado"

La Semana Santa Cardioasegurada eleva hasta un 30 por ciento la supervivencia en paros cardíacos con atención temprana

Irene Ramos

Sevilla - Publicado el

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La Semana Santa es sinónimo de aglomeración de personas, tanto de público como de integrantes de los cortejos procesionales. Y, por tanto, es sinónimo también de posible riesgo de que alguna persona necesite atención sanitaria.

Para dar respuesta a esa realidad en Sevilla se aplica el programa Semana Santa Cardioasegurada. Eso significa que en cada Hermandad que discurre por las calles de la capital, hay personas formadas para ser capaces de formar parte de la “cadena de la vida”.

Lo cuenta José María Villadiego, director del 061 de Sevilla. Desde hace años se trabaja en ampliar la llamada “red de primer interviniente”.

Es decir, que se va dando formación a todos los sanitarios que son cofrades y forman parte de cortejos procesionales de Sevilla. Estos sanitarios serán los primeros en dar asistencia en caso necesario.

Pero esa cadena se ha ido ampliando y también se ha dado formación a otros “hermanos no sanitarios, a los que se ha instruido en primeros auxilios y atención a la parada cardíaca”.

Y más eslabones de la cadena de la vida: “Hemos formado a músicos porque nos parece que es un colectivo también muy amplio y también a capataces y costaleros”.

Son los primeros intervinientes y piezas clave para la atención inicial hasta la llegada de los sanitarios. Es un proyecto que surgió hace ocho años y que va creciendo y ampliando la posibilidad de supervivencia de cualquier persona.

Estos primeros intervinientes “son nuestros ojos y nuestras manos”. Y también son los que ayudan a aumentar la posibilidad de supervivencia. El “masaje de calidad y el uso de desfibrilador supone alrededor de un 30 por ciento de posibilidad de superar un paro cardíaco”.

Como muestra un ejemplo. En la Semana Santa del año 2023 hubo cuatro situaciones de paradas cardíacas, con primera intervención de las Hermandades y uso de desfibrilador.

El resultado es que tres de los pacientes salieron vivos y pudieron ser atendidos después por los profesionales. Por eso “estamos muy concienciados” y “creemos que esa cadena de la vida es el camino adecuado”.

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