El Real Zaragoza, por fin sólido y firme en casa, logra la victoria de la tranquilidad ante el Granada (1-0)

El Real Zaragoza, por fin sólido y eficaz en casa, ganó este Sábado Santo por un gol a cero a un Granada que no parecía jugarse el acceso a los puestos de ascenso directo. Es verdad que los nazaríes tuvieron algunas ocasiones para empatar, especialmente un remate de Quini al larguero en la segunda parte, pero quien llevó la iniciativa durante más minutos y tuvo las ocasiones más claras fue, sin duda, el conjunto aragonés. Los de Escribá, serios en defensa y con claras ocasiones en ataque, pudieron ganar por un resultado más amplio, pues Azón sobre todo las tuvo de las que no se perdonan. Pero al final los tres puntos los dio un golazo de Fran Gámez con el exterior del pie derecho tras taconazo de Bermejo a los 36 minutos de la primera parte.

Se puede decir que el conjunto zaragocista se redimió en su estadio de La Romareda, donde no estaba consiguiendo buenos resultados esta temporada, y logró un triunfo tranquilizador que mantiene a distancia al descenso mientras que para el conjunto nazarí la derrota, la segunda consecutiva, le complica bastante las opciones de ascenso directo.

El Real Zaragoza -que lleva ya siete jornadas sin perder- sumó su sexta victoria en su estadio en diecisiete partidos y por primera vez en la presente campaña fue capaz de derrotar a uno de los seis primeros clasificados, lo que impide que la zona de descenso que marca la Ponferradina se le pueda acercar. Al contrario, el Granada, con la segunda derrota consecutiva, algo que solo ha ocurrido en otra ocasión esta temporada, parece haber entrado en crisis y podría vivir un fin de semana 'horribilis' ya que podría perder también el tercer puesto y bajar dos en la tabla si el Alavés y el Levante son capaces de ganar en esta jornada, ya que ambos están a un solo punto de los granadinos.

El partido tuvo una primera parte de dominio territorial nazarí pero totalmente estéril porque apenas remató a puerta ante un conjunto 'blanquillo' que marró dos oportunidades en boca de gol al inicio aunque se adelantó curiosamente en una de las pocas oportunidades que tuvo de manejar el esférico y una segunda mucho más movida, con ocasiones para ambos conjuntos pero que no fueron capaces de materilizar.

El conjunto aragonés pudo haberse adelantado en el marcador pronto pero Iván Azón, que estrenaba su titularidad después de dos meses lesionado y de haber jugado en la segunda parte del encuentro de la pasada jornada, falló lo que parecía increíble.

En el minuto 7, en boca de gol, no consiguió Azón contactar con el balón tras un centro raso de Giuliano Simeone y dos minutos después se repitió prácticamente la historia porque a medio metro de la línea de gol le dio mal al balón y permitió al guardameta Raúl Fernández despejar.

Después, el Granada se hizo dueño del balón ante un conjunto maño esperando para salir a la contra con velocidad. Los nazaríes amasaban el balón pero eran incapaces de generar peligro y en toda la primera parte solo se produjo un remate de Joaquín Marín "Quini" al centro de la portería 'blanquilla' mientras que los propietarios del terreno, a la contra, daban la sensación de poder crear peligro aunque varias contras se malograron por un exceso de velocidad o por malos controles.

En una de las pocas ocasiones en las que el conjunto de Fran Escribá fue capaz de mantener el balón en su poder y obligar a defender a su rival llegó el 1-0 en una combinación por la banda derecha del lateral Fran Gámez con Sergio Bermejo, que le devolvió el balón de tacón en el área para que Gámez rematase con el exterior de la bota en el minuto 36.

En la segunda parte el Granada siguió dominando pero a diferencia de la primera mitad comenzó a enseñar las uñas ante un equipo zaragozano que no renunció a los contragolpes aunque, como en la primera mitad, le faltó precisión en los envíos. El partido tenía más ritmo porque el calor y el cansancio parecían hacer mella y los huecos aparecían para uno y otro conjunto.

Quini, de nuevo como jugador más entonado de los andaluces, remató cruzado en el área en el 49 y al larguero en el 60 aunque los propietarios del terreno tuvieron el 2-0 entre ambas (m.52) con un cabezazo de Lluís López, a la salida de un córner, que se estrelló en el cuerpo del portero nazarí.

El gol del empate o el segundo de los aragoneses parecía que podía llegar en cualquier momento pero la falta de precisión en unos y otros volvió a ser la protagonista y al final nadie fue capaz de mover el marcador. Se pidió además un penalty en cada área, que no consideraron como tal ni el árbitro ni el VAR.

Real Zaragoza 1: Cristian Álvarez; Fran Gámez, Lluís López, Jair, Nieto; Bermejo (Eugeni, m.87), Francho, Jaume Grau (Zapater, m.68), Bebé (Francés, m.87); Giuliano Simeone (Gueye, m.89) e Iván Azón (Puche, m.68).

Granada 0: Raúl Fernández; Quini (Bodiger, m.77), Víctor Díaz, Ignasi Miquel, Neva (Soro, m.82); Pol Lozano (Bryan, m.62), Meseguer, Melendo (Diedhiou, m.77); Uzuni, Weissman (Callejón, m.62) y Perea.

Goles: 1-0. M.36. Fran Gámez.

Arbitro: Hernández Maeso (Comité Extremeño). Amonestó con tarjeta amarilla a Giuliano Simeone.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 35 de Liga de Segunda división disputado en el estadio de La Romareda de Zaragoza ante 15.504 espectadores. Se rindió homenaje al equipo femenino del Casademont Zaragoza que recientemente se proclamó campeón de la Copa de la Reina de baloncesto. Hizo el saque de honor la capitana Vega Gimeno.