El Albacete perdona la vida en La Romareda a un Real Zaragoza que no da para mucho más (1-1)

Al Real Zaragoza, a pesar de adelantarse en el marcador con un buen gol de cabeza de Lluís López, no le dio para mucho más que para acabar conformándose con un empate este domingo en La Romareda ante un Albacete que fue superior. Los manchegos empataron con un gran remate cruzado del lateral derecho Carlos Isaac, que aprovechó el gran pasillo que le dejó libre todo el flanco izquierdo zaragocista, con Nieto y, sobre todo, Vada, que no defendió la jugada.

El empate, mal menor para los locales vistas las numerosas ocasiones del Albacete, es escasamente provechoso para las pretensiones de unos y otros, de alejarse de la zona de descenso los zaragocistas, o de no ceder terreno en su posición de promoción de ascenso los visitantes.

Ambos sumaron pero los dos se dejaron en el camino importantes puntos en sus respectivas aspiraciones porque en el caso del equipo manchego la victoria del Cartagena sobre el Lugo hace que se le acerque a cinco puntos a esa sexta posición que ocupan los albaceteños y que es la última que da derecho a jugar la promoción de ascenso a Primera.

En el caso del conjunto aragonés desaprovechó haber puesto tierra de por medio con la Ponferradina, el equipo que marca la línea del descenso, y tendrá que seguir mirando hacia la parte baja de la clasificación. A la misma hora que en La Romareda, los del Bierzo también empataron (en casa ante el Mirandés) y por tanto la distancia de los zaragocistas con el descenso es de seis puntos (siete con el golaverage).

Los de Escribá, cuyo último partido en casa fue una goleada al Leganés (3-0), parecían haber enmendado la irregular marcha en su estadio, donde hasta entonces estaba siendo muy sencillo puntuar para los equipos que los visitaban, pero el empate con el conjunto manchego parece volver a la inevitable realidad de que La Romareda es un campo en el que es sencillo puntuar.

El conjunto 'blanquillo', con lo justo, dadas las numerosas bajas, no es capaz de aprovechar las ocasiones que está teniendo para alejarse definitivamente del peligro de la zona roja y podrían pasarle factura más adelante dado el exigente calendario que tiene que disputar. Y en partidos como el de este domingo, con ausencias añadidas como las de Bebé o Zapater, dio muestras de no poder dar más de sí.

El juego zaragpcista es un querer y no poder en muchos momentos porque no tiene ideas y apenas gol y, como está siendo una constante toda la temporada, en La Romareda puntúa casi cualquier equipo medianamente ordenado.

El encuentro comenzó con mucho ritmo por parte de ambos conjuntos y con llegadas a las áreas de manera habitual. Los dos equipos buscaban la portería contraria y cada vez que se pisaba área daban sensación de peligro.

Especialmente lo hacían los visitantes, que tuvieron las dos mejores opciones para haberse puesto por delante en el marcador con un remate de Manu Fuster al larguero en el minuto 20 y con otro disparo de Maikel Mesa en el área tras un barullo, en el minuto 41, que salvó el meta local Cristian Álvarez con una gran estirada.

En el conjunto de Escribá fue Giuliano Simeone el que más inquietó la portería de Bernabé Barragán con un disparo ajustado al poste en el 13. Y otro en el 22 que el cancerbero del conjunto albaceteño envió a córner con problemas tras haber tocado previamente en un defensa, pero eran los visitantes los que daban más sensación de poder marcar.

La vorágine de juego ofensivo y de contras continuas se frenó al filo de la media hora. Los dos equipos debieron pensar que estaban en disposición de abrir el marcador, pero también parecieron pensar que el rival lo podía hacer igualmente, por lo que a partir de ese momento se intentó controlar más el balón y que el juego no volviera a al ritmo frenético previo.

A poco de iniciado el segundo periodo el equipo de Fran Escribá se adelantó en el marcador en un saque de esquina puesto en juego por Valentín Vada y que cabeceó a la red el central Lluís López de forma inapelable.

Sin embargo, la alegría duró poco para los locales, porque en el 66, doce minutos después, un centro de Juan María desde la banda izquierda lo aprovechó Carlos Isaac, que entraba libre de marcaje por el carril derecho, para enganchar un gran disparo y batir a Cristian Álvarez.

Con la igualada en al electrónico el equipo de Rubén Albés se hizo con la posesión del balón ante un conjunto aragonés que esperaba su oportunidad a la contra. Sin embargo, ni unos ni otros, cada uno con su apuesta, fueron capaces de generar ninguna ocasión de gol. Ambos, especialmente los locales, se dedicaron más a nadar y guardar la ropa. Y a conformarse con el emapte. El miedo a perder era evidente.

Real Zaragoza 1: Cristian Alvarez; Fran Gámez, Lluís López, Francés, Nieto; Bermejo (Larrazábal, m.78), Francho, Alarcón (Jaume Grau, m.85), Vada (Eugeni, m.71); Gueye (Puche, m.78) y Giuliano Simeone (Pau Sans, m.85).

Albacete 1: Bernabé; Carlos Isaac, Djetei, Glauder (Ros, m.62), Juanma (Dubasin, m.62); Maikel Mesa (Rodri, m.62), Olaetxea, Riki, Manu Fuster; Higinio (Bolívar, m.85) y Juan María.

Goles: 1-0. M.54. Lluís López; 1-1. M.66. Carlos Isaac.

Árbitro: Gálvez Rascón (Comité de Madrid). Amonestó con tarjeta amarilla a Francés, del Real Zaragoza, y a Juan María, del Albacete.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 33 de Liga de Segunda división disputado en el estadio de La Romareda de Zaragoza ante 19.812 espectadores.