El Real Zaragoza y el Huesca empatan a todo en un bronco partido con dos expulsados en el Alcoraz (1-1)

Tras la clarísima roja a Jorge Pulido, otra mucho más cuestionable a Zapater cambió el rumbo de un choque que dominaban los de Escribá

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Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El Huesca y el Real Zaragoza empataron a todo en el derbi aragonés (1-1), con reparto de puntos, de goles y de expulsiones, en un choque con más pasión que fútbol y más tensión que calidad. El conjunto local dominó más y buscó durante más minutos la victoria ante un equipo de Escribá más conformista, que acabó dando por bueno el empate.

El encuentro vino marcado por las dos expulsiones, una en cada equipo, ambas en la primera parte. Sin discusión la clarísima tarjeta roja a Jorge Pulido por una durísima entrada al tobillo de Giuliano, pero absolutamente cuestionable la que minutos después, con 0-1 en el marcador, le mostró el colegiado cántabro José Antonio López Toca a Zapater.

El capitán zaragocista levanta la pierna, pero no va la acción mucho más allá de un simple juego peligroso que, como mucho, sería amarilla. A diferencia de la clara y aviesa intencionalidad de Pulido en su acción, en la de Zapater no hay voluntariedad alguna. Pero el castigo fue el mismo. Y a fe que lo notó el Real Zaragoza a partir de ese momento, pues pasó de dominador a dominado, cuando tenía ya el marcador a su favor.

Efectivamente, tuvo más la posesión el Real Zaragoza que el Huesca en los inicios del partido, aunque fue un dominio territorial del equipo blanquillo que llegaba fácil hasta los tres cuartos del campo, ya que en el área local los defensas azulgranas estuvieron siempre atentos a los movimientos de los atacantes rivales.

La primera ocasión de gol del partido llegaría en el minuto 13 en un disparo de Obeng que repelió el poste en una buena contra del Huesca, que es lo que mejor hizo a lo largo del partido, siempre con sus señas de identidad de tener un buen bloque defensivo y bien armado y saliendo en contraataques muy rápidos para coger descolocado al equipo rival.

El partido tomó un cariz distinto cuando el capitán del Huesca Jorge Pulido fue expulsado en el minuto 29 por una entrada a Giuliano, y a los tres minutos Bebé con un disparo raso y cruzado batió a Andrés Fernández, con lo que se le ponía complicado el partido a los oscenses.

Pero el partido seguía caliente y el siguiente en pagarlo fue el capitán del Real Zaragoza, con la rigurosísima expulsión de Zapater por una acción de levantar el pie ante Sielva, con lo que los dos equipos se quedaron con diez jugadores en un partido abierto y bronco, y con muchos minutos por delante en el que el fútbol de calidad brillaba por su ausencia.

En el tiempo de prolongación de la primera parte, un disparo raso de Timor desde fuera del área lo despejó corto Cristian Álvarez y el rechace lo aprovechó Obeng, para empatar el partido. Un tanto que dejaba todo en tablas para afrontar la segunda mitad con todo por decidir.

Salió mejor en la segunda parte el Huesca y dio un aviso en el minuto 48 el equipo oscense con varios disparos dentro del área pequeña que sacaron los defensores zaragocistas con apuros, desbaratando el peligro como pudieron.

Los locales dominaron más, entrando sobre todo por las dos bandas, ante un Real Zaragoza que dio muestras de un mayor cansancio, y con poca ambición de cara a la portería contraria, mostrándose conforme con el empate, algo que no quiso el Huesca, aunque no pudo evitarlo pese a buscarlo con ahínco.

En el ecuador de la segunda mitad del partido, el Huesca bajó su ritmo y el Real Zaragoza respiró más tranquilo entrando el partido en una fase muy poco vistosa con el equipo local más volcado sobre el área rival pero con pocas ideas y los de Escribá intentando no cometer errores que le pudieran costar el partido.

Los cambios de jugadores en los dos equipos no dieron mejor resultado y todo siguió igual, con llegadas del Huesca al área rival y con algunos disparos con cierto peligro que salieron altos por medio de Timor en el minuto 76, y de Hashimoto en el 85 y con el Zaragoza defendiéndose hasta el final para conservar un punto.

SD Huesca 1: Andrés Fernández; Andrei, Blasco, Jorge Pulido, Florian Miguel; Sielva (Hashimoto, m.79) Timor, Gerard Valentín (Javi Martínez, m. 88), Juan Carlos (Marc Mateu, m. 79) Joaquín (Rubén Pulido, m. 30), y Obeng (Kanté, m. 88).

Real Zaragoza 1: Alvarez; Fran Gámez, Francés, Jair Jr., Nieto; Vada (Bermejo, m. 77), Francho, Zapater, Bebé (Eugeni, m. 77); Giuliano, (Gueye, m. 83) y Puche (Alarcón, m. 46).

Goles: 0-1, m. 32, Bebé; 1-1, m. 45+3, Obeng;

Árbitro: López Toca (Comité Territorial Cántabro). Mostró tarjeta roja directa por parte del Huesca a Jorge Pulido, minuto 29; y por parte del Real Zaragoza a Bebé, Francho, y roja directa a Zapater. minuto 36.

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima segunda jornada de la Liga Smartbank entre la SD Huesca y el Real Zaragoza disputado en el estadio del Alcoraz ante 8.443 espectadores.

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