PODCAST. 'Ilustres'
Mosén Francisco Izquierdo Molins: 'El apóstol inclasificable'
Repasamos la vida y obra que realizó este cura aragonés y dejaron una huella imborrable y que a día de hoy todavía perdura a lo largo y ancho de Zaragoza y Aragón
Zaragoza - Publicado el - Actualizado
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Según el diccionario de la RAE, la palabra inclasificable significa insólito, raro. Que no admite clasificación. En cierto modo, es el adjetivo idóneo que le podemos poner al protagonista de esta historia. Descubrimos un poco más a fondo la figura Mosén Francisco Izquierdo Molins. Un pionero. Un hombre adelantado a su tiempo. En palabras del Padre Juan Antonio Gracia, un apostol inclasificable.
Nuestra historia comienza un 1 de abril del año 1903 en Torrecilla de Alcañiz. Allí venía al mundo Francisco Izquierdo, Paco para su familia. Era el hijo de un farmacéutico y el pequeño de cuatro hermanos. Desde muy pronto tuvo clara su vocación. Su madre le advirtió que sería una vida de sacrificio y de pobreza. Pero su amor a Dios era más grande.
Es, entre otros, el testimonio de su sobrina, Teresa Izquierdo. Ha hablado a los micrófonos de COPE Zaragoza con cariño y con devoción sobre su tío 'Paco'. No en vano, es una de las personas que mejor conocen su figura. Ya no la pública, sino cómo era en las distancias cortas.
Es solo uno de los muchos testimonios que hemos podido recoger. También han participado personas como José María Naval, Antonio Uliaque, Gonzalo Zueco, Jesús Pérez de Mezquía, María José Cabrera, Eduardo González o el Padre Juan Antonio Gracia. La gran mayoría de ellos también lo conocieron y participaron en diferentes proyectos de ciudad.
UNA CABEZA PRIVILEGIADA
Su amor, el que tenía hacia Dios, le hizo ingresar a una edad muy temprana en el Seminario Menor de Belchite. Posteriormente completaría sus estudios de Teología en la Universidad Pontificia de Zaragoza. Su expediente, ya desde niño, era brillante. Y a más edad, seguía dando pistas sobre su gran potencial y su gran inteligencia. Su ordenación sacerdotal se produjo a la temprana edad de 23 años, en 1926, al tiempo que concluía sus estudios civiles en Filosofía y Letras por la Universidad de Zaragoza. Este era el inicio de su camino sacerdotal por Aragón.
La vida le llevó primero a la Parroquia de Ainzón y, más adelante, a la parroquia de 'Nuestra Señora de la Piedad', en el municipio de Plenas, en la comarca de Belchite. Ya en el curso 1932-1933 sería nombrado profesor del Seminario de San Valero y San Braulio, en la Plaza de la Seo. Ese sería en gran medida el epicentro de sus grandes ideas. En ese seminario, por cierto, el Padre Juan Antonio Gracia, fue uno de sus alumnos.
Por cierto, que entre tanto fue capellán del convento de Santa Rosa y desde 1935 pasó a ser beneficiado de la Iglesia de San Miguel de los Navarros donde permaneció casi tres lustros. Ya afincado en la capital aragonesa comenzó a preocuparse por los jóvenes. Sobre qué sentían. Sobre cuáles eran sus preocupaciones. Hablaba con ellos pero, también, sabía escucharles. Incluso los propios jóvenes, buscaban a Mosén Francisco.
REFERENTE DE LOS JÓVENES
Tanto fue así que en esa década de los años 30 del Siglo XX comenzaría a impulsar el movimiento de Acción Católica. Y es que en Zaragoza, en 1925, ya se había creado el primer centro de jóvenes en San Pablo. En 1930 Mosén Francisco daría un paso más: asumió la consiliaría diocesana y fue el impulsor de este movimiento que en el año 39 crearía centros en todas las parroquias de la diócesis.
Su carisma, que atraía a las nuevas generaciones, le empezaron a hacer una personalidad influyente en Zaragoza y Aragón. Gracias a ese impulso, Mosén Francisco Izquiero Molins empezaría a darle forma a otros proyectos enormes que, hoy en día, perviven en la ciudad.
STADIUM CASABLANCA
Ser un adelantado a su tiempo le hizo emprender proyectos que nunca antes había conocido la ciudad de Zaragoza. Y si los había llegado a conocer, tan solo se habían quedado en papel mojado. La impronta, el espíritu y el carácter diferencial de Mosén Francisco Izquierdo Molins le hicieron, por ejemplo, fundar el Stadium Casablanca.
Este club social y deportivo que, a día de hoy está mimetizado con la ciudad, abría sus puertas en el mes de mayo de 1948. Fue un proyecto pionero en la ciudad y fue gracias al trabajo de Mosén Francisco. Esta institución, que recientemente ha cumplido 75 años, tuvo una gran expansión en los años 50, cuando se ampliaron sus instalaciones. Antonio Uliaque, al que escuchábamos con anterioridad, conoció a nuestro 'Apostol inclasificable' dentro del Stadium Casablanca.
El deporte ha sido muy importante en esta institución a lo largo de los años. Y fue, precisamente, un escenario propicio para seguir manteniendo su contacto con os más jóvenes. Además, siempre disfrutó de esta institución como un socio más. Muchas son las anécdotas que tuvo en sus instalaciones. Para el recuerdo, los bañadores por debajo de las rodillas o sus baños, que obligaban al resto de usuarios a dejar la piscina libre para que Mosén fuese el único en usarla.
En el Stadium, también mostró su preocupación por los jóvenes y también supo adaptarse a sus gustos y costumbre, siempre dentro de un orden. Tanto fue así, que muchos usuarios aseguran con rotundidad que muchas parejas, muchos matrimonios, de aquellas generaciones pioneras cumplirán ahora sus 50 años de casados después de conocerse en el Stadium.
RADIO POPULAR
Dentro de su inquietud, Mosén Francisco también sintió siempre mucha atracción por la radio. Tanto fue así que un 19 de marzo de 1961 fundaría Radio Popular en Zaragoza, el germen de lo que hoy es esta emisora de radio. Aquella fecha, COPE iniciaba sus emisiones desde la actual Casa de la Iglesia en la capital aragonesa, en la Plaza de la Seo.
Su plantilla se compuso por grandes profesionales que marcaron un antes y un después en la radio de la ciudad y que también han querido recordar en este podcast cómo conocieron a Mosén Francisco. María José Cabrera, voz imborrable de COPE, o Eduardo González, referente durante muchos años en los programas deportivos, han puesto sobre la mesa multitud de anécdotas.
LA INDUSTRIA DEL CINE
Acción Católica, Stadium Casablanca, Radio Popular... Son algunas de las iniciativas que Mosén Francisco puso en marcha. Pero la cosa no se quedó ahí. Porque a finales de los 50, concretamente en 1959, abordaría uno de sus proyectos más completos. Con la ayuda de Avelino Moya, Juan Antonio Cremades, Fernando Hué y Teodoro García Ezquerra, crearía e impulsaría la cadena de cines Film Dux.
El objetivo era el de popularizar el cine, hacerlo accesible a todo estrato social. Con tal efecto se inauguraron varios locales como el Cine Dux, en San José, el Cine Pax, en los bajos de la casa de 'Acción Católica', el Ideal, en Valdefierro y el famosísimo Cine Mola, ubicado en el Paseo Sagasta.
LOS TAMBORES EN SEMANA SANTA
Durante años Zaragoza cambió, en buena parte, por la labor realizada por Mosén Francisco. Pero su vocación sacerdotal siempre estuvo ahí y la reflejó con una de las representaciones de fe más bonitas que tiene la ciudad: la Semana Santa.
Un 15 de febrero de 1940 Mosén Francisco Izquierdo celebró la primera Junta General para constituir la cofradía de las Siete Palabras de Zaragoza. Una cofradía que surgió en el seno de la Juventud Masculina de Acción Católica de Zaragoza. Un grupo de ocho afiliados se reunieron por primera vez un 29 de enero con el fin de predicar procesionalmente la frases finales pronunciadas por Jesús.
Fue un 22 de marzo cuando, por primera vez, las Siete Palabras salió a la calle. Se componía de 36 hermanos de vela y capirote; de 8 empujando el paso; y lo más novedoso: 12 con tambor y tercerol, como en el bajo Aragón. Era la primera vez que en la Semana Santa los tambores sonaban en Zaragoza. Mosén Francisco fue el encargado de introducirlos.
En el año 64 cumplieron su 25 aniversario y, entre los actos, se realizó una exposición en Acción Católica. Las Siete Palabras no fue la única cofradía zaragozana a la que dio vida. También a la del Ecce Homo. Aquí nos remontamos al año 1947 cuando el Viernes Santo, en la Plaza Sas, Mosén Francisco anunciaba la fundación de la nueva cofradía.
En esta ocasión, estaba formada por jóvenes obreros y que retomaría la tradición de los terceroles y los costaleros. Y aquí es donde se introduciría otra gran novedad: la matraca o doblera, instrumento tradicional aragonés que también entraba de lleno en la Semana Santa zaragozana.
Fue en la Semana Santa de 1948 cuando el Ecce Homo haría su primera salida procesional. En el 52, el Ecce Homo llevaría la Semana Santa a la margen izquierda, después de varios años procesionando por San José, llegando al barrio del Arrabal y a la parroquia de Nuestra Señora de Altabás. En el 73, se produjo la incorporación de la mujer a esta cofradía. En el 2022, el Ecce Homo celebró su 75 aniversario.
MUERTE DE MOSÉN FRANCISCO
Una vida entregada a los demás que, en sus últimos años, tuvo un esfuerzo añadido. Una larga enfermedad que, poco a poco, fue mermando sus facultades. Eso no impidió que hasta sus últimos días quisiera ayudar a quien pudiera, empezando por su propia familia. Tras varios meses de enfermedad, Mosén Francisco Izquierdo fallecía en Madrid.
Para el recuerdo queda todo su legado y ser una de las figuras más importantes que ha visto la ciudad de Zaragoza en los últimos 50 años. Mosén Francisco Izquierdo Molins. Un hombre singular. Un cura único. Un apostol... inclasificable.