¿Cómo resurgió la ciudad de Zaragoza tras la destrucción que sufrió durante Los Sitios de 1808 y 1809?

'Exposición cartográfica de una ciudad mutante: Zaragoza 1809-1939' reúne en el Palacio de Montemuzo, una interesante muestra de documentos del Archivo Municipal, de la Biblioteca y de la Hemeroteca, que atestiguan cómo cambió Zaragoza tras el asedio de las tropas francesas

Enrique Pérez

Zaragoza - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

      
      
             
      

El Palacio de Montemuzo abre sus puertas hasta el 2 de febrero de 2025 a un fragmento de la historia milenaria de Zaragoza que fraguó lo que hoy es la ciudad actual, tras un tiempo de profundos cambios urbanísticos a los que se vieron empujados sus habitantes tras la resistencia heroica en Los Sitios. 

Ese renacer hasta el final de la Guerra Civil Española se recoge en la “Exposición cartográfica de una ciudad mutante: Zaragoza 1809-1939” basada en documentación que se ha reunido procedente del Archivo Municipal, la Biblioteca y la Hemeroteca.

Esta nueva propuesta cultural del Ayuntamiento de Zaragoza lleva, a través de los planos y fotografías que se conservan en el Archivo Municipal, a la ciudad que quedó destruida tras los Sitios, para hacer un viaje a lo largo del siglo XIX y hasta 1939 en el que veremos a Zaragoza crecer, cambiar, proyectarse hacia lo que es hoy en día.

Esta exposición pretende, por una parte, mostrar la metamorfosis urbanística que sufrió la ciudad en 130 años ayudar a la ciudadanía a conocerla mejor, pero también ensalzar el rico patrimonio cartográfico que se guarda en el Archivo Municipal, conservador de la memoria ciudadana.

En estos planos, fotografías y dibujos veremos la expansión de la ciudad, los nombres cambiantes de las calles y vías públicas, la construcción de jardines y zonas verdes, la llegada del alcantarillado, el vertido y el alumbrado, la construcción de grandes y emblemáticos edificios que representan a la ciudad, las casas de vecinos levantadas, modificadas, derruidas, vividas por las personas que habitaron Zaragoza a lo largo del tiempo y que nos la han dejado tal y como hoy la conocemos.

Este recorrido de más de un siglo cuenta, con estas piezas expuestas, la forma en que trabajaban los profesionales que levantaban los planos de manera manual, quiénes fueron los grandes artífices de estos cambios (arquitectos, ingenieros, topógrafos), y se conecta toda esta información con las personas reales que vivían en estas casas y calles a través del padrón municipal de habitantes. 

      
             
      

Igualmente, por medio de un vídeo, el Ayuntamiento de Zaragoza enseña el proceso de restauración y digitalización de uno de los planos expuestos, que por su antigüedad (mitad del siglo XIX) y gran tamaño (cerca de 3 metros) presenta ciertos retos de conservación.

La oferta se completa con una serie de conferencias organizadas por el Grupo de Investigación ARGOS de la Universidad de Zaragoza, en las que intervendrán todos los expertos que han colaborado en el catálogo así como a José Luis Villalonga.

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