Un experto de Asturias explica la clave para dejar de fumar: “Es lo principal”
El doctor José Manuel Iglesias remarca que "no hay pastilla mágica" para abandonar la adicción al tabaco
Oviedo - Publicado el - Actualizado
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Dejar de fumar es uno de los propósitos más comunes en el inicio del nuevo año y el objetivo que se ha marcado Andrés Prieto, ovetense de 25 años, que afronta el reto de decir adiós al tabaco definitivamente. “Empecé a fumar de adolescente, por la tontería, y me ha provocado bastantes problemas de garganta”, apunta este joven que está decidido a que 2025 sea el año en el que se convirtió en exfumador. Para conseguir esa meta cuenta con la ayuda de la Unidad Antitabaco de Oviedo que dirige desde hace 25 años el doctor José Manuel Iglesias en el centro de salud de Ventanielles. Cada año ayuda a unas 600 personas a dejar de fumar y la mayoría lo consigue. “Nos derivan casos difíciles, personas con otras patologías, y el 50 por ciento consigue su propósito. El porcentaje es mayor si son personas sanas”, ha explicado en COPE.
LA CLAVE PARA DEJAR DE FUMAR
Si algo tiene claro el doctor Iglesias después de tantos años de experiencia en la deshabituación tabáquica es que "lo principal para dejar de fumar es querer dejar de fumar. Hay que tener intención y, si quieres, puedes”. A partir de ahí, la primera puerta que hay que tocar para pedir ayuda es la del médico de cabecera, que remitirá a los pacientes a las unidades especializadas y donde recibirán información de los beneficios que tiene para su salud abandonar la nicotina y los pasos a seguir para conseguirlo.
NO HAY PASTILLA MÁGICA
A la Unidad Antitabaco de Oviedo llegan muchos pacientes pidiendo “la pastilla mágica para dejar de fumar y esa pastilla no existe”, aclara el doctor Iglesias. El tratamiento está basado en la terapia conductual y cognitiva que muestra al paciente qué tipo de pensamientos lo inducen a coger el siguiente cigarrillo. A partir de ahí, hay que “aprender a vivir sin fumar en las situaciones en las que antes recurría al tabaco”. Solo si es necesario, el proceso será combinado con terapia farmacológica.
TIEMPO DE TRATAMIENTO
El tiempo del tratamiento depende de cada persona porque cada fumador tiene una relación diferente con el tabaco. La pauta habitual pasa por fijar seis sesiones, con una semana de intervalo entre una y otra. Las consultas se van espaciando de forma progresiva y el alta llega al año de dejar de fumar. “Ahí ya lo consideramos exfumador”.
LA RECAíDA
Dejar de fumar definitivamente en el primer intento es posible. Pero la recaída también forma parte del proceso de deshabituación tabáquica. La mayoria de los “tropezones” vienen motivados por las “fansías de control”. El doctor Iglesias se refiere a la falsa creencia de que “por una calada no pasa nada”. En ese sentido, recuerda que la nicotina es más adictiva que la heroína o la cocaína”. Por ese motivo, fumar un solo cigarro puede ser un peligro. “Hay quien piensa que puede controlarlo y no es verdad”, alerta el experto.