La encrucijada del absentismo laboral en Canarias: "Hay trabajadores que piden la baja y lo hemos visto de fiesta"

Canarias es la tercera comunidad autónoma con mayor tasa de absentismo laboral, alcanzando el 7,3 % solo superada por País Vasco y Castilla-La Mancha. Este fenómeno no solo está afectando a la productividad y estabilidad de las empresas, sino que genera graves consecuencias en sectores donde la presencia de los profesionales es esencial, como es el caso de la atención a personas dependientes y discapacitados.

En Herrera en COPE Gran Canaria conocimos el caso de Leticia González, fundadora y CEO de Asistia Canaria, una empresa dedicada al cuidado de personas vulnerables y que vive con especial sensibilidad este problema. Según González, el absentismo no solo repercuta en la carga laboral de sus equipos, sino al trato de los usuarios, ellos afortunadamente “hacen magia” y “constantemente apagamos fuego”, pero reconoce que “el absentismo nos afecta mucho porque implica cambiar de profesional que atiende al usuario y esto repercute en su confianza, crecimiento y por supuesto bienestar, sobre todo en personas que requieren cuidados continuos.”

Un sustituto que suple a otro que ya había entrado para cubrir una baja

Además, la situación se complica cuando se observa que las bajas no siempre están justificadas. Leticia relata de casos en que los propios trabajadores que cubren bajan médicas piden su propia baja: “incluso tengo un sustituto, de un sustituto, una situación realmente surrealista". 

Según su experiencia, “hay trabajadores buenos, aquellos que es evidente que están enfermos y trabajadores malos. He detectado casos en los que el empleado ha llamado diciendo que está malo con vómitos y después lo ven de fiesta la Aldea de San Nicolás".

“Esto se está desmadrando,” y reconoce que hoy en día es muy fácil que te otorguen la incapacidad transitoria. “Incluso esto se ha llegado a utilizar como amenaza y coacción por parte de algunos trabajadores. Por ejemplo, si hay algún problema, se habla y se soluciona, pero no se perjudica al resto de sus compañeros a sabiendas de que en una PYME, una persona de baja supone una carga de trabajo para el que continúa con su labor", añade.

cecapyme denuncia que los sindicatos no quieren abordar este problema

Por su parte, Juan José Socas, presidente de CECAPYME, coincide en que el absentismo es uno de los temas más complicados de abordar. “Cuando nos sentamos con los sindicatos, ahora que se está negociando el convenio de hostelería, hablamos de rebaja de horas, de incremento de salario, pero cuando ponemos sobre la mesa el absentismo, nos dicen que de esto no se habla.” 

Los empresarios se encuentran en una difícil posición, ya que el absentismo crónico no solo afecta la operación diaria, sino que incrementa los costos laborales, sin que exista un consenso claro sobre cómo enfrentarlo.

Estos fenómenos, que afecta a una amplia gama de sectores en Canarias, plantea retos realmente importantes tanto para el tejido empresarial como para los servicios de atención social. Las empresas están constantemente buscando fórmulas para controlar el absentismo sin comprometer los derechos de los trabajadores, pero con el aumento constante de los casos y la falta de diálogo entre patronal y sindicatos, parece que la solución está lejos de alcanzarse.