¿Qué cambia con los nuevos agentes de la autoridad en los montes cántabros?

Nuevas herramientas y mayores competencias para los agentes del Medio Natural: Un avance que promete resultados

Cristina Jimeno

Santander - Publicado el

3 min lectura

      
      
             
      

Cantabria, con su riqueza natural, enfrenta grandes desafíos para proteger su biodiversidad. Los efectivos del Medio Natural son la primera línea de defensa ante incendios forestales, actividades ilegales y la preservación del entorno. Sin embargo, hasta ahora, sus competencias eran limitadas. Esto está a punto de cambiar.

Con la reciente publicación de una orden en el Boletín Oficial de Cantabria, estos profesionales adquieren la condición de agentes de la autoridad, lo que les otorga nuevas facultades legales para actuar con mayor eficacia en su día a día.

¿Qué implica ser agente de la autoridad?

GOBIERNO DE CANTABRIA

Ángel Serdio director general de Montes y Biodiversidad y Mª Jesús Susinos consejera Desarrollo Rural

Antes de este reconocimiento, los efectivos podían intervenir en conflictos relacionados con el medio ambiente, pero su capacidad de acción era limitada. Ángel Serdio, director general de Montes y Biodiversidad del Gobierno de Cantabria, explica que ahora podrán realizar inspecciones más exhaustivas, imponer sanciones de forma directa y actuar con mayor contundencia en casos de infracciones como talas ilegales o vertidos contaminantes.

Además, deberán portar una tarjeta de identificación profesional, lo que refuerza su legitimidad y facilita su labor.

Un colectivo mejor preparado

Este avance beneficia directamente a los 145 efectivos del Medio Natural en Cantabria. Para asumir estas nuevas responsabilidades, recibirán formación específica orientada a fortalecer sus conocimientos legales y operativos.

Por otro lado, se han implementado emisoras de corto alcance para mejorar la comunicación entre las cuadrillas, especialmente en situaciones de emergencia. Serdio destaca que, antes de contar con estas herramientas, las comunicaciones eran mucho más lentas, lo que podía comprometer la respuesta ante un incendio o una actividad sospechosa.

      
             
      

Zonas de mayor riesgo: el viento sur, un enemigo constante

El viento sur es uno de los factores que más favorecen la propagación de incendios forestales en Cantabria, y las áreas más vulnerables son bien conocidas: las cuencas del Nansa, Pas, Pisueña y Asón, además de Campoo y Liébana. En estas últimas, las condiciones meteorológicas agravan el riesgo, sobre todo en verano.

Con la activación del nivel 2 de riesgo este pasado fin de semana, el dispositivo de prevención y respuesta se refuerza. Pero no solo se trata de estar preparados: también es vital la colaboración ciudadana para evitar tragedias ambientales.

Recursos y retos a futuro

Cantabria cuenta con medios materiales y humanos para afrontar la temporada de incendios, pero Serdio admite que aún hay margen de mejora. Uno de los próximos pasos será dotar al colectivo de una estructura administrativa más ágil y funcional que permita una mejor coordinación.

      
             
      

En palabras de Serdio: “El esfuerzo está en crear una cadena de decisiones rápida y eficiente, para que cada recurso esté donde se necesite en el menor tiempo posible”.

La ciudadanía, clave en la protección del medio ambiente

Los cántabros también tienen un papel fundamental en la preservación de los montes. Desde evitar prácticas de riesgo como quemas incontroladas, hasta denunciar actividades sospechosas, la colaboración ciudadana puede marcar la diferencia.

Ángel Serdio recomienda estar atentos y ser responsables, especialmente en épocas de alto riesgo, y recuerda que una llamada a tiempo puede salvar hectáreas de bosque.

      

Un paso adelante, pero no el último

Este reconocimiento como agentes de la autoridad es un hito para los efectivos del Medio Natural, pero aún queda mucho por hacer. Desde mejorar los recursos disponibles hasta garantizar la continuidad de la formación, los retos son tan grandes como los montes que protegen.

Por ahora, los montes cántabros cuentan con un colectivo más preparado, reconocido y comprometido, listo para enfrentar los desafíos que plantea el cuidado del entorno natural.