Concurso “Cuentos para escapar y soñar”

“Cuentos para escapar y soñar” es el título de este certamen en el que pueden participar alumnos de Albacete y sus pedanías, en dos categorías: infantil (alumnos de Educación Primaria) y juvenil (alumnos de Educación Secundaria y Bachillerato). Habrá un jurado que elija los mejores trabajos que serán premiados con lotes de libros y material didáctico, además de un reconocimiento muy especial, la publicación de los cuentos en la revista de creación literaria Barcarola.

La concejala de Cultura, Teresa García Arce, ha animado a los niños y a los jóvenes de la ciudad, a escribir sobre las vivencias que están experimentando en estos días de confinamiento, o bien dejar volar su imaginación y escribir de aquello que les apetezca y motive. “Escribir puede resultar un buen ejercicio para hacernos más llevadera esta experiencia y nuestras vivencias quedarán plasmadas en el papel para siempre, esta ocasión puede ser única para adentrar a los más jóvenes en el ejercicio de la escritura”, ha argumentado la concejala.

Los trabajos se podrán presentar mientras siga en vigor el estado de alarma por la emergencia sanitaria del Covid-19. Los cuentos deben llevar título, ser textos originales e inéditos y tener una extensión máxima de cuatro folios escritos en Times New Roman, cuerpo 12.

Deben ser remitidos al correo electrónico cultura@albacete.es

El confinamiento en nuestros hogares puede ser un tiempo propicio para la creación

Durante situaciones de confinamiento han surgido famosas obras y personajes de la mejor literatura universal. En 1816, que fue conocido por el ‘Año de la pobreza’ o el ‘Año que no tuvo verano’, por la erupción del volcán Tambora en Indonesia que ocasionó alteraciones en el clima dando lugar a una importante disminución de la temperatura, lo que originó escasez de alimentos en el hemisferio norte. En este ambiente, Lord Byron se inspiró para crear poemas como ”Oscuridad”; Mary Shelley y John Polidori idearon relatos de terror que fueron el germen de Frankenstein y el Drácula de Bram Stoker, y el pintor inglés J.M.W. Turner plasmó en sus cuadros sorprendentes atardeceres que surgieron de contemplar el cielo teñido de rojo por el azufre volcánico proveniente de la gigantesca explosión volcánica.

Sin duda, la situación de emergencia que hoy vivimos nada tiene que ver, pero quien sabe si estas circunstancias inéditas puedan dar lugar a todo tipo de creaciones