Rubén Pinar se doctora en 'Victorinos'

El aficionado que acude a una plaza de toros empieza a tener claro que si Rubén Pinar está 'acartelado' tiene asegurado que verá oficio, poderío ante los toros y madurez, la de un torero que, a sus 28 años, se encuentra en un gran momento de forma.

Este fin de semana, sin ir más lejos, Pinar consiguió sendas puertas grandes en Soria y Burgos y en ambas circunstancias los enemigos no eran cosa fácil. Es lo que tiene la ganadería de Victorino Martín y parece que Rubén ha comenzado a entenderse bien con ellos, pese a sus dificultades.

En conversación de este lunes con Miguel Yeste, Rubén PInar ha comentado precisamente esto de la madurez porque "yo admiro a aquel torero que lo tiene todo muy claro con 18 años pero en esta profesión no es lo habitual. Por eso veo ahora con 28 años las cosas muy diferentes a cómo las veía hace 10 años".

Sobre los triunfos en Soria y Burgos, el de Tobarra nos ha contado que no fue fácil, en especial lo del sábado en Soria "pero ha habido acierto con la espada, que últimamente nos había privado de algunos trofeos".

De futuros compromisos, Rubén nos ha explicado que lo próximo es el día lunes 8 de julio en San Fermín ante los toros de Cebada Gago, una corrida en la que tiene puestas muchas esperanzas, además de que la feria navarra ha sido propicia para él en los últimos años. Y acerca de la próxima Feria de Albacete, sobre la que se especula que podría protagonizar una 'encerrona' de seis toros de distintas ganaderías o torear con 'las figuras', Rubén ha dicho que las dos opciones están sobre la mesa, pero aún no se ha cerrado nada.