¿Sigues recibiendo postales navideñas? Ángela propone rescatar una tradición que se está perdiendo

Ángela lleva a casas de sus familiares y amigos postales llenas de cariño, nostalgia y felicidad cada Navidad

Sergio Sánchez

Toledo - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

En el cálido abrazo de las festividades navideñas, España ha abrazado durante años, una tradición encantadora: las postales navideñas. Las postales navideñas en España son más que simples trozos de papel, son mensajes de alegría que se envían con cariño. Unas postales, decoradas con imágenes vibrantes y mensajes festivos, que han sido una tradición arraigada en la sociedad española durante muchas décadas.

Con la llegada de las redes sociales, esta tradición se está perdiendo, pero todavía queda gente a las que le fascina enviar postales. Es el caso de Ángela Sacedón, una pintora casada en Talavera de la Reina que cada año retoma este clásico para mostrar su cariño a familiares, amigos, conocidos y gente de su entorno. Ángela dice: “Desde que tengo recuerdos, siempre he enviado tarjetas navideñas”.

Esta manchega, al principio las compraba y las enviaba, pero su ingenio ha ido a más: “Hace unos años decidí hacer fotos a mis cuadros y hacer las tarjetas de Navidad. Las llevo a la copistería y luego las decoro yo personalmente una a una”. Algo que le encanta a las personas afortunadas que las reciben: “Algunos me dicen que las coleccionan y están deseando que se las envíen. Me paran por la calle y me preguntan Ángela, ¿Este año como van a ser?”.

¿Sigues recibiendo postales navideñas? Ángela propone rescatar una tradición que se está perdiendo

Una de las postales creadas por Ángela Sacedón

Este año Ángela se ha roto un brazo y eso no ha sido impedimento para mantener esta tradición, aunque reconoce que: “Yo recibo muy pocas, pero me encanta mandarlas”.

Pero no es solo la estética lo que define a estas postales, son los mensajes sinceros y cálidos que acompañan a las imágenes lo que las hace especiales. Las palabras cuidadosamente elegidas expresan amor, esperanza y prosperidad, creando un puente emocional entre el remitente y el destinatario. "Feliz Navidad" y "Próspero Año Nuevo" son saludos comunes, pero la creatividad y la originalidad a menudo se desatan, brindando un toque personal a cada envío. Por eso Ángela dice: “Me encantaría que la gente volviera a coger esta tradición, sé que no están por la labor y es complicado, pero sería muy bonito volver a abrir las postales navideñas y leerlas”.