El Gobierno pone en marcha una campaña contra la violencia machista en las fiestas, festivales y ocio nocturno

La campaña ‘Ser Libre. Estar Viva’ tratará de evitar las agresiones machistas en fiestas, festivales y lugares de ocio nocturno durante los meses de agosto y septiembre en Castilla y León. La delegada del Gobierno, Virginia Barcones, presentó este miércoles en Aranda de Duero (Burgos) esta iniciativa, aprovechando una reunión preparatoria para la Junta Local de Seguridad que se celebrará el viernes con motivo del Sonorama Ribera 2023 para que el festival más multitudinario de todos los que se celebran en la Comunidad se desarrolle “con normalidad y sin incidentes”.

Se trata de una campaña genérica que “no se centra solo en la violencia sexual. Buscamos llegar fundamentalmente, al tratarse del verano, a núcleos de ocio donde hay una presencia mayoritaria de jóvenes”, señaló Barcones. Se circunscribe en tres escenarios: los grandes festivales, las fiestas de pueblos y ciudades y los lugares de ocio nocturno privado. “Sigue siendo fundamental -dijo-, concienciar contra las distintas formas de violencia contra las mujeres, identificar y denunciar toda forma de violencia machista e informar sobre los distintos servicios de atención integral que las víctimas tienen a su disposición. De eso va la campaña ’Ser Libre. Estar Viva’”.

En el último año se produjeron en Castilla y León 619 delitos contra la libertad sexual de los que 72 fueron agresiones sexuales con penetración. Los delitos contra la libertad sexual aumentaron un 18 por ciento con respecto a 2021, lo que para la delegada del Gobierno, “tiene una interpretación no necesariamente negativa porque el porcentaje de mujeres que han sufrido violencia sexual fuera de la pareja y que han denunciado lo sucedido en la Policía, la Guardia Civil o en el Juzgado no llegaba al 10 por ciento, según la macroencuesta de violencia contra la mujer de 2019”.

"Quiero creer y creo que se debe a las activas políticas de concienciación y de reducción de la tolerancia social frente a este tipo de delitos, lo que se traduce en una mayor disposición de las víctimas a denunciar y en una reducción de los altos niveles de infradenuncia que se dan en la violencia sexual”, sentenció.

La campaña tendrá en Castilla y León especial incidencia durante los meses de agosto y septiembre. Para la delegada “es fundamental informar sobre los recursos existentes para atender a las víctimas de toda forma de violencia machista en nuestra comunidad autónoma. Estos recursos, caracterizados por su capacidad de atención integral y especialización, tienen que ser puestos en marcha por todas las instituciones competentes. Es necesaria la cooperación institucional de todas las administraciones públicas”.

Se va a poner en valor el 016, el Alercops, la asistencia jurídica gratuita, la atención psicológica, el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado o la importancia de las redes de mujeres. “Y no podemos dejar de poner el acento en todas las políticas de prevención y acompañamiento a las víctimas de toda forma de violencia machista”, indicó.

Reunión

En la reunión participaron el general jefe de la duodécima zona de la Guardia Civil, Luis del Castillo; el jefe regional de Operaciones de la Policía Nacional, Jesús del Amo; el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente; la coordinadora de las unidades contra la violencia sobre la mujer de las subdelegaciones del Gobierno, Jessica Martínez; el teniente coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos, Alfonso Martín, y el inspector jefe de la Comisaría de Aranda de Duero, Joaquín Gomá.

En ella se ha hablado del ocio relacionado con las fiestas de ciudades y pueblos, con especial incidencia en estas últimas, que son las que se llevan a cabo mayoritariamente en agosto y septiembre. Se han celebrado ya algunas fiestas relevantes en ciudades de Castilla y León con motivo de las fechas próximas a San Juan y San Pedro.

En todas ellas se ha tenido en cuenta el combatir la violencia machista con campañas de sensibilización y la ubicación de puntos violeta que son un instrumento promovido por el Ministerio de Igualdad para implicar al conjunto de la sociedad en la lucha contra la violencia machista y extender, de forma masiva, la información necesaria para saber cómo actuar ante un caso de violencia contra las mujeres.

Puntos violeta

Los puntos violeta forman parte del catálogo de medidas urgentes del Plan de Mejora y Modernización impulsado por distintos ministerios del Gobierno de España y suponen un cambio de enfoque en las políticas públicas de atención a las víctimas, situando la violencia machista como un problema estructural que requiere de la implicación del conjunto de la sociedad para acabar con ella.

Con estos puntos violeta se intenta implicar a toda la sociedad en la lucha contra la violencia machista. Acercar los servicios integrales a las víctimas a través de su entorno. Y facilitar información sobre cómo actuar ante un caso de violencia machista a establecimientos, entidades, empresas y organismos públicos.

Se ofrece herramientas para ello. Como una guía con información sobre cómo actuar ante un caso de violencia machista en el entorno, así como con recursos para las propias víctimas. También incluye información sobre qué es la violencia machista, sus diferentes manifestaciones, y cómo detectarla.

Igualmente, diversos materiales como carteles y adhesivos que tienen como objetivo señalar que ese espacio es un lugar seguro para las víctimas, donde pueden recibir información y acompañamiento si lo necesitan. Y, además, distintivos para identificar a personas implicadas en la lucha contra la violencia machista: cualquier persona que lo utilice representará una puerta de acceso para las mujeres víctimas a los recursos que estas necesiten.

Ocio nocturno

La campaña llegará también a los espacios de ocio nocturno privado. Las discotecas, salas de concierto, bares, bares musicales, etc., son espacios de encuentro y relación que, como muchos otros, a veces se convierten en el escenario de comportamientos que impiden que todo el mundo pueda disfrutarlos igual. La violencia sexual o la amenaza de sufrirla es una de las formas prioritarias de limitación de acceso a los espacios públicos en clave de igualdad para las mujeres. “Vamos a promover desde las unidades de violencia contra la mujer -explicó Barcones-, reuniones con los responsables de estos espacios de ocio para explicarles en qué consiste nuestra campaña y para solicitarles su colaboración”.

Se insistirá en el fomento de la denuncia como punto de partida para afrontar el problema. También se difundirá el uso de la aplicación Alercops, además de buscar un aumento de las medidas de seguridad en estos establecimientos. Se les va a ofrecer a ellos y a los trabajadores de esos lugares de ocio, incluidos camareros o vigilantes de seguridad, charlas para marcar estrategias de colaboración. “Nos gustaría conseguir que el sector empresarial actuara de manera conjunta y consensuada para establecer formas de prevención y de actuación que sean efectivas y útiles”, ha apuntado la delegada del Gobierno.

Y si, por desgracia llega a darse el caso de que la agresión sexual se produce, también tienen que recibir pautas de cómo actuar, de cómo derivar esos casos a través de un circuito óptimo para la atención inmediata de la víctima y para que el agresor pueda ser puesto a disposición judicial.

Sonorama

En la reunión mantenida esta mañana en Aranda de Duero ha tenido especial presencia la celebración del festival Sonorama Ribera que se celebrará entre el 9 y el 13 de agosto. La apuesta del Gobierno de España en la Junta Local de Seguridad de este viernes es un despliegue de la Policía Nacional durante los cinco días del festival similar al del año pasado. “De tal manera -según Barcones-, que la gente que asiste tiene que saber que siempre va a haber un policía cerca, aunque no lo identifiquen como tal. Además, no debe faltarles en ningún caso atención sanitaria inmediata”.

Es fundamental que la víctima denuncie cuanto antes mejor y, después, es también básica la coordinación. Una vez que se produzca el aviso o la denuncia, por parte de la policía se intentará delimitar el entorno en el que se ha producido el presunto delito para identificar al autor o autores. Si la víctima decide acudir a cualquiera de los puestos sanitarios que habrá por los lugares de celebración del festival, “allí habrá un policía para hacer su trabajo”, según la delegada.

Las fuerzas y cuerpos de seguridad estarán muy pendientes del entorno del recinto de acampada. El dispositivo de la Policía Nacional se refuerza con otras unidades especializadas que se desplazarán a Aranda de Duero, por ejemplo, de intervención, de vigilancia del subsuelo y, como ya ocurriera el año pasado, una unidad especializada de policía a caballo que estará por las calles de la ciudad. Y habrá también helicóptero.

Muchos efectivos que se complementarán con los de la Guardia Civil que, además de la regulación y vigilancia del tráfico en las carreteras adyacentes, realizará controles preventivos en la entrada a Aranda de Duero para detectar sustancias estupefacientes o armas. Para facilitar esta tarea, la llegada de autobuses se centralizará en la estación de autobuses. Será muy importante contar con la colaboración de la Policía Local y de voluntarios de Cruz Roja y de Protección Civil.

Otros festivales

Muchas de estas medidas serán parecidas a las que se establezcan en las juntas locales de seguridad de nuestros principales pueblos y ciudades tanto con motivo de la celebración de eventos especiales (conciertos o festivales), como en las fiestas patronales.

Virginia Barcones ha destacado que “no estamos aquí hoy solo por el Sonorama. Queremos que, a modo de protocolo, todos los festivales o eventos musicales que se celebren en nuestra comunidad autónoma se rijan por pautas de seguridad similares a la vista de que funcionan y dan sus frutos”.

Cada vez hay más festivales musicales en Castilla y León y cada vez reúnen a más gente. El EnClave de Agua, en Soria, que se celebra este año los días 27, 28 y 29 de julio, fue seguido por 40.000 personas el año pasado. El festival Músicos en la Naturaleza, de Hoyos del Espino, en Ávila, que todavía no tiene fecha este año, atrajo hasta Gredos a 11.000 personas. El Ebrovisión, en Miranda de Ebro congregará también a miles de personas el 31 de agosto y 1 y 2 de septiembre. El AbejaRock, de Béjar, en Salamanca rondará los 5.000 asistentes el 18 y 19 de agosto. Son solo algunos ejemplos que nos hablan de la dimensión de estos encuentros.