La delicada situación de la Guardia Civil en Burgos: 90 vacantes y un cuartel cerrado

El Partido Popular preguntará al ministro del Interior del Gobierno de España para aclarar la "grave situación" que se está experimentando en los diferentes cuarteles de la Guardia Civil ubicados en la provincia de Burgos, debido a la disminución en el número de profesionales que prestaban servicio.

En este contexto, los legisladores solicitan una "información detallada" acerca de la situación en cada una de estas instalaciones, con el objetivo de determinar "cómo se encuentra afectada la seguridad ciudadana en cada comarca de Burgos y cuándo está previsto que se solucione con urgencia". Por otra parte, pretenden conocer información específica y detallada acerca de los cuarteles ubicados en Villadiego, Castrojeriz y Melgar de Fernamental.

El senador del PP por Burgos, Javier Lacalle, manifestó su descontento al señalar que "este Gobierno Socialista está más preocupado de hacer pactos impresentables, que de ofrecer ayuda a los burgaleses cubriendo todas las plazas de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado”.

La Guardia Civil se queda "temblando" en Burgos

El déficit de guardias civiles en la provincia de Burgos, donde tras el último movimiento de personal han quedado alrededor de 90 plazas sin cubrir, deja "temblando" a cuarteles de todas las demarcaciones, que presentan importantes problemas para mantenerse abiertos y prestando el servicio ordinario, siendo el de Villadiego el que tiene la situación más complicada, pues ha tenido que cerrarse ante la falta de patrullas.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha confirmado a EFE el déficit de plantilla, que debería contar con casi un millar de agentes y tiene escasamente setecientos, una situación que se ha agravado con la convocatoria de plazas de primavera, que se ha hecho efectiva este septiembre, y ha dejado un saldo negativo en Burgos.

Así, en el último movimiento se fueron de la provincia aproximadamente 150 agentes por los 30 que llegaron, por lo que la AUGC estima en 110 el número de vacantes, una cifra que queda ligeramente paliada con los guardias civiles que llegaron de prácticas este verano (54), si bien algunos se han ido a especialidades (dentro y fuera de Burgos).

De este modo, la AUGC calcula que ahora mismo hay 90 puestos sin cubrir como consecuencia de esa convocatoria de plazas, la mayoría ubicados en le medio rural pues solo en Seguridad Ciudadana en la provincia se han marchado 120 agentes, en traslados tanto a la capital como fuera de Burgos.

Ante este déficit de personal, la Asociación Unificada de Guardias Civiles ha asegurado que muchos cuarteles de la provincia "están temblando", más allá de la situación que se vive en Villadiego, donde el cuartel se ha tenido que cerrar por falta de patrullas, y solo se abre un día a la semana para atender denuncias.

Lo ha confirmado la AUGC después de que el PP haya anunciado este miércoles que sus senadores por Burgos habían registrado preguntas al ministro del Interior para conocer la situación de la plantilla de la Guardia Civil, cuartel por cuartel, y en especial en Villadiego, donde la decisión de cierre no se ha comunicado a los vecinos, según la denuncia política.

Con refuerzos externos y limitando los descansos

Para que la escasez de personal afecte lo menos posible al servicio que se presta, la AUGC denuncia que se está haciendo a costa del descanso de los agentes y ha puesto como ejemplo que, para la próxima semana, se han denegado permisos para que los 63 agentes que van a desfilar el 12 de octubre, en el día de la patrona, puedan hacerlo.

Además, las carencias en Seguridad Ciudadana se están paliando en algunas demarcaciones con el apoyo de otras unidades, como el SEPRONA, intervención de armas o incluso Tráfico, pese a que es una unidad que presenta también un "déficit" de personal, aunque este tiene que ver con la distribución de puestos de trabajo, ha matizado la AUGC.

Por todo ello, la Asociación Unificada de Guardias Civiles reclama a autoridades y mandos que hagan "autocrítica" y analicen por qué los agentes no quieren trabajar en Burgos, pues tras el último movimiento de personal "todas las provincias de Castilla y León están llenas", salvo la burgalesa.