El Llionés, la lengua romance "más antigua de la península"

Alicia Cabreirizo: "el leonés se encuentra actualmente en el libro rojo de las lenguas en peligro de extinción de la UNESCO"

Esther Peñalba Aller

León - Publicado el

3 min lectura

Alicia Cabrerizo, presidenta de la Liga Celta del País Llionés habla del leonés en Mediodía en COPE León.

Nuestra lengua leonesa es originaria de latín, por lo tanto, es una lengua romance. Ramón menéndez Pidal, el más importante historiador lingüístico y presidente de la Real Academia de la lengua española, la definió en su momento como dialecto histórico del latín, por lo tanto no provenimos del castellano.

Somos la lengua más antigua de las romances en la península. Encontramos etimologías desde celtas hasta germánicas, como si no hubiera pasado el tiempo, toda una arqueología inmaterial.

Se habla en el territorio del Reino de León: León Zamora, Salamanca y Miranda del Douro, en Portugal. Encontramos variantes como el pachuezu, el habla del burón: un habla que solamente la hablan los hombres, el cabreirés, el senabrés, el alistano, el mirandés en Portugal y el charro, muy conocido por su palra del Rebollal.

Puesta en valor

Su puesta en valor en nuestro territorio ha hecho que la lengua leonesa no pase de ser una lengua minorizada que se encuentra actualmente en el libro rojo de las lenguas en peligro de extinción de la UNESCO; la legislación de la comunidad la trata como un objeto a proteger y promocionar, pero realmente es totalmente ignorada.

"El leones será objeto de protección específica por parte de las instituciones, por su particular valor dentro del patrimonio lingüístico de la comunidad. Su protección, uso y promoción serán objetos de regulación." declara Alicia.

Gracias al país de Portugal, que oficializó en 1999 el mirandés, la lengua leonesa es cooficial en Portugal junto con el portugués y consta como una de las lenguas oficiales en Europa.

Su recuperación es esencial, sobre todo en el ámbito rural y en la gente mayor. Actualmente hay una serie de movimientos académicos que luchan por su recuperación y cabe destacar que incluso tenemos un diccionario propio elaborado por la bretona Janick le Men.

Palabras leonesas

Palabras comunes que solemos utilizar y que la gente no es consciente de que no es castellano sino leonés son: "Carral", "facera" o "faceira", "rebutir", "sarrio", "baburrina", "encetar", "dedas" (ya que el leonés diferencia los dedos de las manos de la de los pies, cosa que no ocurre en castellano), "cucear", "esgaya", "prestar", "emburriar", "señardá", "xeitu", "panxulina", "llariega", "fervienza", "murias", "llumbreiru", "facendeira", "filandón", "mancar"...

No solamente tenemos casos corrientes en el habla como sustantivos comunes, sino también sustantivos propios como los nombres de los lugares. Un claro ejemplo es el nombre de "La Robla", qué proviene de su forma más arcaica "robra", en la heráldica de este pueblo salen dos paisanos dándose la mano "robrando" un trato, esta palabra proviene del latín "rubricum" y en el leonés moderno hemos recuperado su significado original: la utilizamos para designar la firma con la que cerramos un trato.

Unos de los rasgos más característicos de la lengua leonesa es el uso de la "f-" inicial en palabras que en castellano empezarían por "h-" como "farina", "facer"..., la caída en las desinencias latinas "-um", "-us" de la "s" y la "m" respetando la "-u" a final de palabra, como "fatu", al contrario que el castellano que la evoluciona a "-o" final. La doble palatalización inicial, es decir, la doble "l" a principio de palabra como "llar" o "llagar". O las terminaciones para hacer aumentativos y diminutivos como son "-on", "-ona", "-ín"/ "-inu" e "-ina".

Relación con otras lenguas

Encontramos su relación con otras lenguas por el contacto territorial: tenemos por un lado el gallego, en el que se encuentra en una zona de transición con el leonés: el problema es que quieren imponer la estandarización que proviene de Galicia y que no respeta esa riqueza lingüística de este contacto de lenguas, así perderíamos giros lingüísticos tanto del leonés con galleguismos como del gallego con leonesismos. Sin no contar ya con la parte del castellano.

Temas relacionados