El mirador más alto de Segovia
La torre de la Catedral de Segovia lleva abierta a la visita desde 2014
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La torre de la Catedral de Segovia es uno de los grandes referentes arquitectónicos para los visitantes de Segovia. Su esbeltez y singularidad la convierten en el gran atractivo de la conocida por muchos como la Dama de las Catedrales.
En 2014 este emblema de la ciudad se abrió al segoviano y visitante, y desde entonces, 178.724 personas han disfrutado no solo de la panorámica de Segovia y su entorno natural. En este tour guiado el que se adentra por la capilla de San Blas, lugar de acceso a la torre, se encuentra de lleno con la historia de la Catedral y de la ciudad a través de cuatro niveles.
Desde fuera se puede decir que a varios kilómetros a la redonda la torre define el perfil de la ciudad, dejando a la Catedral en una casi levitación entre cielo y tierra enmarcada, a su vez, entre las diferentes torres de menor tamaño que surgen de las iglesias segovianas, muchas de ellas de estilo románico.
En sus orígenes estaba coronada por un espectacular chapitel de madera de caoba traída de América y de estructura piramidal. Su altura alcanzaba los 108 metros, siendo la torre más alta de España durante el siglo XVI y principios del XVII.
El 18 de septiembre del 1614 el chapitel fue destruido por un incendio causado por una gran tormenta eléctrica que lo calcinó por completo.
Ello llevó al cabildo catedral a construir un cuerpo, ya de piedra, para volver a estructurar esta parte superior de la torre. Se encargó el trabajo a Pedro de Brizuela y al arquitecto Juan de Mugaguren.
En su lugar, diseñaron una cúpula de estilo herreriano, esta vez de piedra con una altura que se rebajó hasta los 88 metros.
La torre abrió sus puertas el 3 de octubre de 2014 a turistas y visitantes. La visita guiada a la torre es desde entonces una opción más para conocer el templo a nivel histórico y religioso, dentro de un entorno como es Segovia, declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985.
En total, son cuatro los niveles que el segoviano y visitante puede disfrutar, y donde se les traslada a la historia de la Catedral, de la torre y del patrimonio que atesora el templo.
La Sala del Audiovisual es la primera parada de la visita guiada a la torre. En su interior se reproduce un vídeo mapping envolvente con recreaciones en 3D que trasladará de una forma única a la historia constructiva de la Catedral y su torre.
Además, en su primera parte, el visitante se adentra en las obras de arte y espacios más importantes del templo y salas. En los muros cuelga la serie de tapices que narra la historia del general Pompeyo Magno, tejidos en Bruselas en el siglo XVII.
Este espacio es uno de los que más curiosidad despierta, ¿cómo pudieron vivir las generaciones de campaneros y familias?, se preguntan muchos. El que es el segundo cuerpo de la torre se distribuye en cuatro estancias donde los campaneros y familiares vivieron hasta 1950.
Cuenta con una cocina, sala de estar y dos habitaciones perfectamente conservadas. En su interior el guía explica cada uno de los detalles de cómo era vivir en este tipo de vivienda y la función del campanero.
Desde la casa del campanero se accede a la sala del reloj, el lugar de trabajo en el cual se hacía funcionar el mecanismo de las campanas. En ella se expone en sus paredes el resto de los tapices flamencos de la vida de Pompeyo Magno que se habían visto en la Sala del Audiovisual.
Da nombre a esta sala el reloj que se ubica en su interior, semejante al de la Puerta del Sol de Madrid y fabricado en Estrasburgo en 1882. En la planta y bóveda se observa cómo la casa del campanero se conecta con un sistema de cuerdas con el campanario, un nivel más arriba, para de esta forma acceder a tocar las campanas sin necesidad de subir.
Una parte fundamental de esta torre son las escaleras. Diseñadas en forma de caracol se cuentan un total de 308 hasta el punto más alto de la torre, “Las Ocho Bolas”, donde se alcanza una altura total de 88 metros.
La escalera de caracol se construyó adosada a una de las esquinas exteriores de la torre consiguiendo una integración armónica con el cuerpo central.
Tras subir un total de 190 escalones se accede al campanario. Es lo más esperado por las vistas panorámicas que ofrece el mirador más alto de la ciudad.
Desde los diferentes balcones se localizan los monumentos más importantes: el Acueducto romano, las numerosas iglesias románicas y sus torres, el Alcázar, la muralla, el cementero judío o los monasterios y conventos. En el horizonte se erige la sierra y la meseta castellana que con cada estación del año se viste de diferentes tonalidades.
Las visitas guiadas tienen lugar de lunes a domingo a las 10:30, 12:00, 13:30, 15:00 y 16:30. Sábados 18:00.