ECONOMÍA

El 13% de los jóvenes españoles compra productos falsificados a conciencia

El daño para las empresas suma 82 millones de euros anuales, según un estudio de Euipo, la agencia europea para la propiedad intelectual

Redacción COPE Cataluña

Barcelona - Publicado el - Actualizado

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En España, cada año se pierden más de 80 millones de euros debido a la falsificación de equipamiento deportivo. Esta cifra, que representa el 12,5% de las ventas en este sector, no incluye otros artículos falsos como camisetas de fútbol o zapatillas deportivas, que están categorizados de manera separada. En total, en Europa, se estima que las prendas de vestir falsificadas alcanzan los 12.000 millones de euros anuales.

A nivel europeo, Francia, Austria y Países Bajos son los países que sufren las mayores pérdidas monetarias, con cientos de millones de euros cada uno. Proporcionalmente, Rumanía, Lituania y Hungría son los más afectados, ya que el equipamiento deportivo falsificado representa hasta el 20% del total de las pérdidas en ventas en cada uno de estos países.

La falsificación deportiva: Un agravio económico y un riesgo para la salud

La falsificación no solo impacta económicamente, sino que también pone en riesgo la salud y la seguridad de los consumidores, al tratarse de productos que no cumplen con los estándares de calidad. El problema se agrava con la facilidad del comercio online, donde muchos consumidores compran artículos falsos a sabiendas.

Artículos falsificados

Camisetas deportivas falsificadas

Según el Barómetro de la propiedad intelectual entre los jóvenes de la Euipo, la agencia europea para la propiedad intelectual con sede en Alicante, un 10% de las personas de entre 15 y 24 años en la UE admite comprar intencionadamente equipamiento deportivo falsificado, con Grecia liderando esta práctica con un 18%. En España, el porcentaje este porcentaje baja al 13%.

Estas prácticas no solo afectan a las empresas titulares de derechos, eliminando puestos de trabajo y deteriorando la imagen de marca, sino que representan un peligro directo para los consumidores.

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