El Gregorio Marañón cuenta con el primer quirófano hibrido con impresora 3D del mundo
El hospital madrileño se convierte en pionero en la integración de tecnologías en uno de sus quirofanos, que ya ha realizado con éxito 15 intervenciones
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
La tecnología de la impresión en 3D tiene cada día más utilidades. Estos días de navidad en Madrid hemos visto como se está usando, por ejemplo, para las figuras y escenarios de los belenes, pero más allá de hacer este tipo de cosas más artísticas, la impresión 3d tiene utilidades prácticas hasta en la medicina. El primer quirófano híbrido con impresión 3D del mundo está en el hospital Gregorio Marañón. Este quirófano no es como otro cualquiera y de hecho a simple vista puede hasta no parecerlo.
Lo primero que se ve al llegar es una sala con un cristal que da a la sala de operaciones muy parecido a un control de un estudio de radio. En esta sala se revisa un TAC, un escáner que se le ha hecho a un paciente justo antes de la operación en el que se puede ver la evolución de su enfermedad, por ejemplo, si un tumor ha crecido desde la última revisión. Con esta información se crea un modelo de guía quirúrgica, un instrumento que se usa para tener más precisión durante una operación y que está personalizado para cada caso.
Este modelo se manda a la segunda sala, situada justo detrás de la sala de operaciones, donde se encuentra la impresora 3D. Allí se fabrica la pieza y se esteriliza en un proceso que dura más o menos media hora. En esta fase intervienen hasta 12 profesionales distintos entre cirujanos, técnicos de imagen o radiólogos. El doctor Rubén Pérez Mañanes, director de la unidad 3d, nos explicaba que "El gran avance no es la tecnología en sí misma, sino hacerla funcionar toda de manera integrada".
Ya en la sala de operaciones se implementa esa guía en la operación que se ha fabricado, pero la utilidad de la tecnología no acaba ahí. Durante la intervención también hay una persona trabajando con unas gafas de realidad aumentada que se encarga de operar en una simulación 3d con el modelo del TAC que se le ha hecho en un principio al paciente. Gracias a esto pueden ver partes de la operación que no se verían de manera habitual y planificar mejor los siguientes pasos a tomar durante la operación.
Una revolución para la cirugía
Pues en primer lugar esto consigue que el tiempo de las cirugías se reduzca prácticamente a la mitad. Desde junio se han intervenido a 15 personas y según nos contaban los resultados han sido mejor de los esperados. Pero la clave de todo esto es que aún puede avanzar más, de momento solo pueden fabricar pequeñas piezas que sirven como guías en las operaciones, pero en poco tiempo se podrán fabricar prótesis personalizadas para cada caso, algo que según nos contaban revolucionara el mundo de la cirugía por completo.
Todo esto llegará con el paso del tiempo, cuando los costes de fabricación de estos implantes a medida sean más bajos y la impresión 3d este algo más optimizada, pero de momento el Hospital Gregorio Marañón ha sido el primero del de España en conseguir la licencia de fabricación de productos sanitarios a medida y la certificación de su sistema de gestión de calidad del proceso.