Este es el bonito gesto del Ayuntamiento de Arganda del Rey para que Carmen pueda llegar al colegio

Una gran medida política para mejorar la vida de una niña de 9 años

Carlos Murillo Sedano

Publicado el

2 min lectura

      
      
             
      

Una escalera de colores en el barrio de Los Villares de Arganda del Rey ha permitido facilitarle el camino al colegio a una niña de 9 años del municipio que padece el Síndrome de Morsier. Pero, ¿Qué es el Síndrome de Morsier? Teóricamente se llama displasia septo-óptica (DSO)  y es una rara malformación congénita del neurodesarrollo infantil con afectación anatómica y funcional sistémica. Se caracteriza por hipoplasia del nervio óptico, malformación cerebral en la línea media e hipoplasia del eje hipotalámico-pituitario

El Ayuntamiento de Arganda del Rey ha sido quien ha llevado a cabo esta bonita iniciativa que ha permitido mejorar la vida de Carmen, quien padece esta enfermedad. El alcalde, Alberto Escribano, ha señalado a través de sus redes sociales que una de las afecciones que presenta los pacientes que padecen este síndrome es la imposibilidad de "ver en profundidad" los elementos de las calles. "Con los que se encuentra los ve en un solo plano", ha señalado.

Cambio de vida

"Lo que nosotros vemos normalmente, donde empieza y donde termina, para ella no hay terminación, y lo que hace el color es avisarla de que hay un salto", explica Yolanda, la madre de Carmen, del impacto que va a tener en su día a día que la escalera que sube todos los días para ir al colegio esté pintada de diferentes colores. "Ella ve plano, cuando nosotros vemos a ocho metros ella lo ve a un metro, no ve la realidad como los demás", termina apuntando su madre. 

CANVA

Síndrome de Morsier

¿Cómo comenzó esta historia? Los padres de Carmen querían que el Ayuntamiento hiciera algo, encontraron un correo electrónico y escribieron pidiendo primero una rampa. El Consistorio contestó que no era posible. “Hablamos con el optometrista y nos dijo lo de los colores. Así que volvimos a escribir pidiendo que pintaran los escalones y la respuesta fue positiva. Lo pedimos en primavera y lo han hecho”, indica Yolanda.

La incidencia de la DSO es variable, 6'3 a 10'9 casos por cada 100.000 habitantes/año, presentando una igual distribución en ambos sexos (4). "Sus padres nos pidieron pintar los escalones de colores diferentes ya que era la única forma de que la pequeña los pudiese diferenciar cuando va al colegio y así evitar que se caiga como hasta ahora. Un pequeño gesto con el que seguro hemos facilitado mucho su día a día", explica Alberto.

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