Se pierde en el Retiro y vuelve a casa solo, sorteando coches y personas
Simba, un perro Jack Russell, ha demostrado ser un crack; desapareció en el Retiro cuando paseaba con su dueña y volvió a casa jadeando, tras recorrer tres kilómetros cruzando calles como Alcalá o Goya
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Simba acaba de unir su nombre al estrellato canino donde figuran por derecho propio perros como la collie Lassie (protagonista en 13 películas), Scooby Doo (40 películas y 12 series), 101 dálmatas con la insoportable Cruella de Vil intentando hacer abrigos con la piel de los perretes, Milú (inseparable compañero de fatigas del mítico Tintín) o más recientemente Bolt, el perrito Disney con superpoderes pero solo en el set de rodaje y Pancho (protagonista de los anuncios de la lotería, otro Jack Russell tan listo como Simba).
UN DRAMA PERRUNO CON FINAL FELIZ
Simba no es actor (todavía) pero lo ocurrido el jueves pasado en el parque del Retiro fue otra película, un film de suspense y miedo pero con final feliz. Muy feliz. Somaya, su dueña, estaba paseando por el Retiro con Jazz y Simba, sus dos perros hermanos Jack Russell. En un suspiro, Simba, el perro que nunca se separa de Somaya, desapareció sin dejar rastro.
Varias personas comenzaron entonces a buscar al perrillo perdido que había tomado sus propias decisiones: volver a casa en la calle del General Pardiñas. Para ello tuvo que recorrer, él solito, más de tres kilómetros cruzando calles atestadas de tráfico como Alcalá, Príncipe de Vergara y Goya. Simba llegó jadeando una hora después de perderse su rastro pero sano y salvo.
UN DESPISTE DE QUINCE SEGUNDOS
“Estaba fatal, totalmente en shock”, Somaya recuerda la angustia que pasó. “No me acuerdo siquiera de las personas que pasaban y me intentaban ayuda a buscar a Simba y a las que estoy muy agradecida. Es una sensación horrible. Fueron solo quince segundos y Simba ya no estaba. Se lo digo a todo el mundo. Basta un despiste de nada para que pierdas a tu perro”.
Rodrigo, marido de Somaya, tiene una peluquería cerca de su casa en la calle del General Pardiñas, cerca de su domicilio. Allí vio entrar a Simba jadeando tras cruzar calles como Alcalá, Principe de Vergara y Goya...
“Es listísimo este perro”, nos cuenta Rodrigo. “Suerte que no le pasó nada. Yo no sabía ni siquiera que se había perdido. Cuando le vi entrar en la peluquería me llamó la atención que venía muy alterado, jadeando y muy cansado pero, aparte de eso, le vi bastante normal. Como siempre”.
Somaya ha vuelto al Retiro este pasado fin de semana con sus dos perritos pero sin perderlos de vista ni un momento. Ha aprendido la lección y comparte estos consejos:
“Si me volviera a pasar algo así, lo primero que haría sería respirar profundamente diez veces para no entrar en shock. Luego llamaría al 092, el teléfono de la Policía Municipal, y hablaría con la gente que tuviera más cerca porque la gente habla con la gente. Al final, había más de veinte personas buscando a Simba en el Retiro y yo no sabía ni quiénes eran”.
Desde algunas protectoras de animales, coinciden en estas recomendaciones y alguna más: poner el número de teléfono y hasta un GPS en el collar y nos recuerdan que estos perros, los Jack Russell, son muy inteligentes. Pero por el bien del corazón y del sistema nervioso de tus dueños, por favor Simba, no lo demuestras más veces recorriendo tú solito medio Madrid.
Guau guau.