El quebrantahuesos se empieza a asentar en la Tinença de Benifassà

Este mes de junio han llegado hasta Bel, pedanía de Rossell y enclavada en plena Tinença de Benifassà, 3 nuevos ejemplares de quebrantahuesos, 2 machos y una hembra, llegados 2 de ellos de Guadalentín (Andalucía) y un tercero desde el zoo de Liberec (República Checa) tras haber nacido en Austria.

Un nuevo paso para el proyecto de recuperación de esta ave en dicha zona del norte de la provincia de Castellón, que vive su sexto año de suelta de aves y que momento empieza a arrojar los primeros resultados positivos.

En COPE hemos querido conocer más de un proyecto que arrancó con las primeras reuniones en 2016, y que una vez aprobado su plan de viabilidad y contar con el visto bueno de administraciones y organizaciones afines al mismo, recibió en 2018 a los primeros ejemplares.

De esta manera, este 2023 vive el sexto año de sueltas de animales, que eso sí, son diferentes a las que estamos acostumbrados por así decirlo: “Los animales que llegaron el día 2 todavía son jóvenes para volar, no es como otros proyectos. Lo que hacemos es que la última fase antes que abandonen el hacking (cueva donde viven temporalmente en Bel) lo vivan en la zona donde en el futuro podrían volver a criar. Ahora pasan 1-2 meses en las instalaciones de liberación, alimentándose por su cuenta, y cuando se vean preparados se marcharán”.

Así nos lo ha explicado David Izquierdo, coordinador del proyecto en la zona, y que nos ha detallado la importancia de este tiempo par el animal: “Esta última fase del desarrollo cognitivo de los pollos es de 1- 1,5 meses es para que se acomoden a la zona donde pueden volver para anidar. Una vez abandonen el nido, entran en fase de dispersión, pero cuando alcanzan la madurez sexual vuelven al punto de partida. Eso ocurre a los 4-5 años. Por ello, es importante el periodo en el hacking para que se fijen al territorio y al hábitat”.

Este tiempo para la vuelta, una vez alcanzada la madurez sexual por parte del animal, ya la han hecho 2 ejemplares liberados en las 2 primeras campañas. Son, tal como nos detalla Izquierdo, “2 machos que ya se encuentran relativamente fijados en la zona. No todo el año, ya que por ejemplo en verano se van a otras zonas, aunque cuando son las épocas de cría sí vuelven aquí, a partir de septiembre-octubre y para estar aquí en invierno.”

Un hecho que como apuntan desde el proyecto de recuperación “nos da esperanzas para el futuro. Ahora sería cuestión que alguna hembra bien de este proyecto o de otras zonas como Pirineos o Picos de Europa llegara aquí y pudiera haber una primera pareja en la Tinença de Benifassà”.

Pero, ¿hasta qué punto es importante recuperar a esta ave en la zona? Izquierdo nos lo detalla desde 2 perspectivas: Por un lado, "la Tinença es un punto estratégico para el proyecto a escala europea. Ahora estamos en la fase 2 del mismo, con la Tinença como punto intermedio que puede valer de conexión entre Andalucía, Pirineos y Picos de Europa. Por ejemplo a los 2 últimos sí han volado ejemplares, por lo que si se estableciera núcleo poblacional sería importante. Por otra parte, para la Tinença sería importante porque el quebrantahuesos es el único animal que se alimenta de huesos, serviría para “limpiar” los restos de animales y ayudaría a mantener limpia la zona. No hay otra especie que lo hace”.

Todo este proyecto además ha generado otros beneficios no sólo a nivel medioambiental, sino también sociales e incluso turísticos: “la Tinença de Benifassà es una zona desconocida, pero desde que está el proyecto ha venido mucha gente de visita o hacer voluntariado. También muy buena aceptación en la zona, ya que el quebrantahuesos no es una especie conflictiva. La gente incluso ha hecho el proyecto suyo”.

Incluso los más pequeños de la zona se han logrado involucrar, bautizando a cada uno de los animales, contando este año también con los ancianos del centro de día de la localidad y La Pobla de Benifassà. Los 3 ejemplares, tal como nos ha explicado Izquierdo, han sido nombrados como “Fredolí el macho y Farigola y Flora las hembras. Cabe destacar que los nombres empiezan todos por F porque al ser el sexto año del proyecto así son más fáciles de reconocer”.

De momento, el proyecto sigue en avance, y ahora sólo quedará esperar unas semanas para ver a estos 3 jóvenes “pollos” volar hacia otros lugares y seguir con su crecimiento, para que en pocos años puedan regresar al que ya es su nuevo hogar.