Más restricciones de agua en Castellón ante la falta de lluvias

La ausencia de precipitaciones pinta un horizonte complicado en Castellón que lleva a algunas poblaciones a adoptar medidas preventivas

Quique Rodríguez

Castellón - Publicado el - Actualizado

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La falta de lluvias impide la recuperación de los acuíferos y en muchas ocasiones están al límite. Por ello y ante el incremento de la población en verano, hay pueblos que se ven obligados a adoptar medidas de restricción para poder garantizar el abastecimiento humano. Este es el caso de Torás, El Toro y Barracas. Las tres poblaciones han adoptado hoy medidas conjuntas por los problemas que presenta el acuífero que comparten, aunque en estos momentos hay agua suficiente pero ven peligrar el líquido elemento si no llueve en las próximas semanas.

Así lo explica a COPE el alcalde de Torás, Carlos Leoncio del Río: "El problema nos viene cuando la gente que veranea en los pueblos se marchen; la gente de los pueblos nos vamos a quedar sin agua y hay que racionalizarla para que podamos tirar adelante hasta que nos lleguen las aguas de lluvia. Las esperamos como si fueran de mayo, pero las queremos para octubre o septiembre".

Restricciones

Torás, El Toro y Barracas prohíben el lavado de coches, el riego de jardines y el rellenado de piscinas, además de dejar en mínimos las fuentes y también dejar de regar los jardínes, debido al estado del acuífero que comparten estas tres poblaciones. "Tenemos agua suficiente, pero estamos descendiendo -el nivel del acuífero- a un ritmo muy acelerado, porque tenemos mucha población".

El primer edil de Torás lamenta que "tenemos muy poca cultura del agua: Se están regando jardines, se lavan coches, se tira agua por las calles para eliminar el calor del asfalto... y eso no puede ser".

A la espera del otoño

Castellón está padeciendo el rigor de la sequía con embalses vacíos, como el de Ulldecona o María Cristina y en total presentan un 17% de su capacidad, lo que ha llevado a que la Confederación Hidrográfica del Júcar haya decretado la emergencia por sequía en los sistemas del Cenia y Palancia y la alerta en el Mijares-Plana Alta. Además, una docena de municipios llevan meses recurriendo a cubas de agua para abastecer el consumo humano y numerosas explotaciones ganaderas para dar de comer a los animales.

El interior ya no solo está a la espera de la lluvia, también de una nieve que no hace acto de presencia desde hace varios años. Nevar rellenaría los acuíferos en el interior y si no lo hace de forma importante, los pozos se resienten y unido a que no llueve, no se pueden recargar.

"La nieve de la sierra de Gúdar se filtra y llena un acuífero inmenso. Nunca se ha conocido en Torás que haya restricciones de agua, siempre hemos tenido muchísima agua y ahora tenemos agua, pero vemos que no llegamos a septiembre al paso que vamos", concluye.