VALENCIA BASKET

El Valencia Basket decepciona en Belgrado y es un juguete en manos del Estrella Roja (82-64)

Los valencianos mantienen la imagen desangelada del domingo ante Unicaja y vuelven a mostrarse sin recursos ofensivos ni solidez defensiva. Preocupación por la inconsistencia

El Valencia Basket decepciona en Belgrado y es un juguete en manos del Estrella Roja (82-64)

Fermín Rodríguez

Valencia - Publicado el - Actualizado

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El Valencia Basket carece de consistencia. El otro día Ibon Navarro lo deslizaba en la sala de prensa después de asaltar la Fonteta con su Unicaja: "Esta película ya la hemos visto, verles doce bajo en el marcador al inicio del último cuarto y que lleven el partido a esa zona en la que hacen daño". Esa película que todos conocen, que el conjunto de Álex Mumbrú vive de golpes de inspiración individual, de tirones, de rachas. Entrene cuatro días o uno. Es el estilo del equipo, sus tics, manifestados hoy en los dos primeros cuartos en su máxima expresión. Los valencianos son capaces de conceder sólo 11 puntos en los primeros diez minutos y 28 en los siguientes diez. Una montaña rusa defensiva, un juego de extremos. De cerrar el aro, a vivir, a permitir, una bacanal de puntos. Y con eso es complicado mantener una estabilidad competitiva.

El equipo ha demostrado que es capaz de afear a los rivales cuando pone su físico en funcionamiento, como hoy en el primer cuarto. Y que la defensa le ha dado las mejores victorias de la temporada, a excepción del triunfo contra Anadolu, que fue a un marcador alto. Pero sin defensa no suele haber alegrías. Lo que ya sabemos es que los valencianos atacan muy mal. Casi siempre con soluciones individuales. Hoy es cierto que ha habido intención de ser generoso, pero Pangos ha errado un par de tiros abiertos cuando el encuentro estaba ajustado y se ha pagado. Pero no es excusa, porque el resto ha sido un horror.

Estrella Roja ha empezado atascado, pero con la lucidez de Teodosic (siete asistencias) y el talento anotador de Nedovic (6 de 7 en triples para un total de 27 puntos en 18 minutos) ha encontrado su ritmo anotador, sin dejar de defender, y ha hecho del segundo cuarto una fiesta. Esos 28 puntos han llevado el partido al descanso con un 39-30, poco castigo para la superioridad mostrada por los balcánicos.

Semi Ojeleye, a pesar de sus nueve puntos y 6 rebotes, no consigue darle solidez al Valencia Basket

Semi Ojeleye, a pesar de sus nueve puntos y 6 rebotes, no consigue darle solidez al Valencia Basket

La vuelta de vestuarios ha traído una ligera reacción (41-35), muy ligera, porque Nedovic y Tobbey hacían trizas la blanda defensa taronja. Para entonces el colapso ofensivo era total. Cambiaba quintetos Mumbrú, ya había gastado la zona, pero nada. Lo ha intentado con una técnica, pero tampoco. El tercer cuarto ha mantenido la comodidad de los locales (61-49).

Los últimos minutos han sido un sonrojante trámite. Sfairopoulos, el técnico de los balcánicos, ha ido sentando a Teodosic y a Nedovic con cierta suficiencia, relajado y confiado ante la superioridad de los suyos. Ni la entrega de Pradilla ha maquillado la dolorosa imagen del equipo. No estaban Davies, Jovic ni Touré. Da igual, esta película la hemos visto más veces. Ya lo dijo Ibon Navarro.