Mérida - Publicado el - Actualizado
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El tiempo sigue siendo motivo de preocupación para los cofrades que se preparan para la Semana Santa. A medida que nos acercamos al Domingo de Ramos, las condiciones meteorológicas generan incertidumbre y preocupación entre los organizadores y participantes de las procesiones.
Hasta el Domingo de Ramos, el pronóstico es relativamente favorable, con temperaturas que recuerdan más a mayo que a marzo, alcanzando máximas de hasta 28 grados. Sin embargo, a partir del lunes, se espera la llegada de varios frentes que podrían cambiar drásticamente el clima.
Samuel Biener, de Meteored, advierte que lo peor podría ocurrir en la recta final de la semana grande. Esta perspectiva meteorológica mantiene en vilo a los cofrades, que temen que las condiciones adversas puedan afectar las procesiones y otras actividades programadas para la Semana Santa.