Miguel Ángel Perera, Puerta Grande en Manzanares acompañado por David Galván
Ambos triunfaron en una muy buena corrida de toros de "La Palmosilla", mientras Molina falló con la espada.
Badajoz - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
La tarde taurina en el coso de la Avenida de Andalucín de la muy bella localidad ciudadrealeña comenzó con un toro encastado pero falto de clase, en el que Jesús Díaz, Fini, brilló colocando las banderillas. Miguel Ángel Perera mostró firmeza desde el inicio, lidiando con un toro de La Palmosilla que se movió sin ritmo, punteando y rebrincando. A pesar de las dificultades, Perera logró conectar con el público con una labor destacada por el pitón derecho, aunque mató a la segunda, paseó una oreja.
La faena al cuarto toro fue la obra de un torero en plena madurez profesional. Miguel Ángel Perera, sin alardes estéticos pero con un complejo engranaje técnico, cuajó a un noble y soso toro de La Palmosilla. Con templanza y paciencia, Perera dio tiempo entre muletazos, logrando una sensación de ligazón sin avasallar a su oponente. Este dominio técnico, junto con una estocada certera, le valieron dos orejas y aplausos para el toro en el arrastre.
David Galván encontró en el segundo toro un noble y calificado oponente. Aunque el toro carecía de fuerza, permitió a Galván desplegar un elegante recibo a la verónica y un trasteo de muleta lleno de gusto y profundidad. La faena, aunque de más a menos, culminó con un epílogo por molinetes y una estocada a la primera, lo que le granjeó dos orejas.
El quinto toro, un ejemplar bravo de La Palmosilla, persiguió la muleta con codicia. Galván construyó una faena con altibajos, destacando en los naturales. Su manejo certero del acero le permitió cerrar con dos orejas, consolidando una tarde triunfal.
El tercer toro, aunque con más ganas que fuerza, encontró en Molina un torero lleno de entrega. Inició su faena de rodillas con pases cambiados por la espalda, demostrando garra y valentía. Sin embargo, falló repetidamente con el descabello, lo que empañó su actuación.
En el sexto toro, Molina buscó redimirse. Plantó cara con entrega a un toro que se dejó al inicio pero se apagó al final. A pesar de su empeño, Molina falló de nuevo con la espada, escuchando dos avisos y dejando escapar la oportunidad de salir a hombros.
La Trayectoria de Miguel Ángel Perera
Miguel Ángel Perera, nacido en Puebla del Prior, Badajoz, ha forjado una carrera marcada por su valentía y capacidad artística. Desde su alternativa en 2004, Perera ha demostrado una maestría técnica y un compromiso inquebrantable con el arte del toreo. Su estilo, caracterizado por la templanza y el dominio de la técnica, le ha ganado el respeto y la admiración en los ruedos más importantes del mundo. En cada faena, Perera no solo lucha contra el toro, sino que también busca emocionar y conectar con el público, consolidándose como uno de los toreros más completos de su generación. Recientemente celebro en la Plaza de Toros de Badajoz sus 20 años de alternativa.
La tarde en la plaza fue testigo de la grandeza del toreo, donde la valentía y el arte se fusionaron en un espectáculo inolvidable. Perera, Galván y Molina dejaron su huella, cada uno con su estilo y entrega. Perera, en particular, reafirmó su estatus como un maestro del ruedo, combinando técnica, templanza y una capacidad artística que conmueve y eleva el toreo a nuevas alturas.
Ficha Técnica:
Plaza de toros de Manzanares (Ciudad Real). Corrida de toros. Menos de media entrada.
Se lidiaron seis toros de La Palmosilla, de correcta presentación. Primero encastado aunque falto de clase. Segundo noble y manejable, aplaudido en el arrastre. Tercero blando. Cuarto manejable aunque soso, aplaudido en el arrastre. Quinto bravo. Sexto a menos.
Miguel Ángel Perera (de azul turquesa y oro): pinchazo y estocada entera arriba (oreja); estocada entera arriba (dos orejas).
David Galván, que sustituía a Borja Jiménez (de gris plomo y azabache): estocada entera desprendida (oreja); estocada entera arriba (dos orejas).
Molina (de blanco y oro): estocada casi entera algo contraria y perpendicular y siete descabellos (ovación con aviso); siete pinchazos y estocada entera contraria (ovación tras dos avisos).
Juan Carlos Rey saludó tras banderillear al segundo.
Miguel Ángel Perera y David Galván salieron a hombros.