La empresa de la mina de Cáceres se aprieta el cinturón
Concentrará en Cáceres el peso de la gestión del proyecto y no en Australia, y acometerá un ajuste de su presupuesto debido a la ralentización de las ventas de vehículos eléctricos en todo el mundo, y especialmente en Europa.
Cáceres - Publicado el - Actualizado
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La empresa de la mina de Cáceres se aprieta el cinturón. La ralentización de las ventas de vehículos eléctricos en todo el mundo, y especialmente en Europa, y la situación del sector del litio, cuyo precio ha caído en picado en los últimos meses, han llevado a la compañía australiana, Infinity Lithium, a concentrar en nuestro país y en concreto en Cáceres, el peso de la gestión del proyecto, y acometerá un ajuste de su presupuesto.
Así, el peso de la gestión del proyecto pasará a estar Cáceres. De esta forma, "la empresa matriz apoya el trabajo que está realizando en Extremadura New Energies y los avances administrativos logrados en los últimos meses por el equipo directivo español", indican desde ENE.
Ryan Parkin, director general de la compañía, ha anunciado su dimisión, aunque permanecerá en su cargo hasta la próxima Junta General de Accionistas, prevista para finales de noviembre. También se han adoptado otras medidas para garantizar la fortaleza de la compañía de cara a los próximos meses.
Un ajuste que se debe en primer lugar a la situación del sector del litio y de la movilidad eléctrica, que por diversas circunstancias ha causado una ralentización de las ventas de vehículos eléctricos en todo el mundo, y especialmente en Europa. Además, de que "se ha tenido en cuenta la evolución administrativa del proyecto de extracción y primera transformación de litio de Extremadura New Energies en Cáceres", indican desde ENE en una nota de prensa.
El proyecto se encuentra en el paso previo al inicio de las obras, estando en estos momentos el grueso del trabajo en manos de los técnicos de la Administración regional.
El consejero delegado de Extremadura New Energies, Ramón Jiménez, ha explicado que se trata de aplicar medidas para reforzar el proyecto extremeño, que supondrá una inversión inicial de más de 1.430 millones de euros y la creación del orden de 700 empleos directos durante al menos 26 años. En este sentido, ha dejado claro que el proyecto sigue adelante y que confían en obtener cuanto antes los permisos necesarios para seguir avanzando según los plazos previstos.