Ética, bien común y sostenibilidad a debate en un encuentro de empresarios en Santiago

Son alrededor de 200 empresarios, directivos y profesionales los que participan en el segundo encuentro organizado por el arzobispado compostelano. En esta ocasión reflexionan sobre bien común, ética y sostenibilidad.

¿Cómo contribuye la Iglesia Católica a las reflexiones éticas sobre Inteligencia Artificial (IA)?, ¿Cómo casar ética y economía en el horizonte de una sostenibilidad justa? O debatir sobre el bien común desde una perspectiva contemporánea y adecuada a los estándares de la sociedad actual. Son los grandes asuntos que ocupan a los asistentes de esta cita que se celebra en San Martín Pinario, en pleno casco histórico compostelano.

LA IGLESIA ANTE LA IA

El encargado de abrir las ponencias fue el Arzobispo Vincenzo Paglia, que animaba a ser críticos frente a avances tecnológicos “incluso cuando están equipados con sensores y actuadores, como es el caso de los robots, los algoritmos funcionan reduciendo ciertos aspectos de la realidad a códigos numéricos, excluyendo una infinidad de dimensiones que nuestra sensibilidad capta y que escapan a los principios de la modelización matemática”. Y es que a veces el lenguaje lleva a equívoco, la IA no es humana, es una imitación.

En este debate participaba el catedrático de Ciencia de Computación e inteligencia artificial de la Universidad de A Coruña, Alberto Pazos, que decía que a la IA no se le puede dar más atributos que los que corresponden a una herramienta y hay que poner el foco en el uso: “Si caemos en el error de creer que es más que una herramienta, le damos herramientas a quien cree que esto va a superar al hombre”. Aseguraba el experto que la inteligencia artificial se puede usar para el bien o para el mal, como cualquier “herramienta poderosa”.

ÉTICA Y EMPRESA

Vivimos en un momento que sorprende por la velocidad de los cambios. Consciente de esto, el Arzobispo de Santiago, Monseñor Francisco José Prieto, actúa de anfitrión y en la inauguración, invitaba a todos a aportar reflexiones en el momento actual, especialmente al sector empresarial: “Que nuestras empresas puedan ser un compromiso por una economía integradora y no excluyente”. También pedía saber acoger a la migración “desde la realidad, pero también desde la dignidad”. Demandaba a las empresas que sean “cauce para la inserción social de tantas personas que merecen una oportunidad no solo para un trabajo digno, sino para un desarrollo personal creativo”.

El Presidente de la confederación de empresarios de España, Antonio Garamendi, reivindicaba el trabajo que hace el sector en nuestro país: “la mayoría de empresas familiares somos los principales responsables del crecimiento económico. Lo hemos demostrado en tiempos de bonanza, pero también en las crisis que hemos sufrido, la última, la pandemia, donde fuimos fundamentales para recobrar la normalidad y seguir impulsando el desarrollo social y económico de nuestro país”.

El Presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Luis Argüello, invita a pronunciar más las palabras “alianza” y “vínculo” en un mundo en el que individualismo y poder tienen sus preferencias: “Es difícil, así, ponernos de acuerdo en una propuesta ética, que necesita siempre un fundamento. Para nosotros, y creo que es la aportación que podemos hacer desde la Iglesia, lo que fundamenta una propuesta ética es descubrir que estamos vinculados. Que somos personas, no individuos”. Invita a que la fraternidad sea un hecho en la vida real y, por supuesto, también en el mundo de la empresa, que no deja de ser un ámbito en el que se generan alianzas.

MISA DEL PEREGRINO, MÚSICA Y MOMENTOS DE ENCUENTRO DISTENDIDO

El jueves llegaban a Compostela y ya participaban en la Misa del Peregrino en la Catedral de Santiago de Compostela. Posteriormente, asistían al concierto, a cargo de la Orquesta Clásica de Vigo y el Orfeón Terra A Nosa “Mozart: La Misa de la Coronación”. El programa incluyó la Sinfonía Nº 34 en Do mayor, K. 338, seguida de la Missa Brevis en Do mayor “de la Coronación”, K. 317. Esta última pieza, compuesta por Mozart en 1779, es reconocida por su emotividad y esplendor. Con el valor añadido del escenario: la mismísima Catedral compostelana.

Ya por la noche los asistentes compartían una cena buffet de confraternización en la hospedería de San Martín Pinario.

En la jornada puramente de trabajo, los profesionales han sido recibidos por el arzobispo anfitrión, Monseñor Francisco José Prieto, el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Luis Argüello, también el nuncio del Papa, Don Bernardito Auza, el presidente de la patronal española, Antonio Garamendi y el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda.