El acusado de abusar de una niña de 14 años en Lugo dice que las relaciones fueron “consentidas”
El fiscal pide para el acusado 12 años de cárcel y una indemnización de 50.000 euros para la víctima
Lugo - Publicado el - Actualizado
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Un hombre acusado de abusar sexualmente de una niña de 14 años de edad afirmó este miércoles en el juicio, que se está celebrando en la Audiencia Provincial de Lugo, que las relaciones con la adolescente fueron “consentidas”.
El ministerio fiscal pide doce años de cárcel para el procesado por un delito continuado de abuso, dado que la edad mínima para el consentimiento de relaciones sexuales es dieciséis años.
Sostiene que abusó de la hija de una pareja con la que mantenía desde hacía años una relación de “amistad”, hasta el punto de que acudía habitualmente a su domicilio y participaba en las celebraciones y fiestas familiares.
El acusado reconoció esta mañana en la vista oral que había mantenido relaciones sexuales en dos ocasiones con la menor de edad, en su casa, pero insistió en que fueron “consentidas”.
Además, matizó que la relación con los padres de la víctima era más propia de personas que se conocen que de amistad.
Abusó de la niña en tres ocasiones
Sin embargo, el ministerio público sostiene que el procesado utilizó esa “confianza” para enviarle mensajes a la niña a través de Whatsapp, hasta convencerla de que fuese a su casa para mantener “relaciones íntimas”.
En junio de 2019, después de que la menor cumpliese 14 años, la invitó a su casa y, aunque la niña “le dijo que no”, mantuvo relaciones sexuales con ella, sostiene el fiscal.
Hasta el mes de noviembre de ese mismo año, “continuaron los encuentros entre el procesado y la menor”, con “relaciones sexuales” en “al menos tres ocasiones”, en el domicilio de él y en el de ella, ambos en la ciudad de Lugo.
Para evitar que los padres de la niña se enterasen de lo que sucedía, le insistía para que no les contase nada y borrase los mensajes que le enviaba.
Prohibición de acercarse a la víctima
El 2 de febrero de 2020, el juzgado le impuso al acusado la prohibición de acercarse a la víctima o de comunicarse con ella por cualquier medio.
El fiscal sostiene que la menor “sufrió un daño emocional que requiere intervención terapéutica”, así como “un daño moral”.
El ministerio público pide que sea condenado a doce años de cárcel, así como que sea expulsado del país cuando cumpla la parte de condena correspondiente que determine la Audiencia Provincial.
Asimismo, pide una indemnización de 50.000 euros para la víctima y que se le prohíba al acusado acercarse o comunicarse con ella durante 16 años.
A la petición del ministerio público se ha sumado también la acusación particular.