La APEHL espera que el proyecto para rehabilitar la Casa da Torre siga adelante en Lugo

La Xunta de Galicia ha iniciado los trámites para rescindir el contrato al esperar la concesionaria 13 meses por la licencia de obra

La Casa da Torre está pegada a la Muralla

José Luis Ramudo

Lugo - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

La Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería e Turismo de Lugo (APEHL) lamenta que la Xunta de Galicia haya iniciado los trámites administrativos para anular el contrato de la obra de rehabilitación del antiguo Hospital de San Miguel, también conocido como Casa da Torre, anexo a la Muralla romana, que iba a convertirse en la sede de esta organización sectorial.

El presidente de la APEHL, Cheché Real, recordó que fue la propia Xunta de Galicia, en su día, quien le ofreció a la asociación de hosteleros de Lugo la posibilidad de emplazar su sede en este edificio, en el casco histórico de la ciudad, una posibilidad que la organización vio con buenos ojos desde el principio.

El plan inicial de la administración autonómica era recuperar este edificio histórico y ceder parte de uso a la Asociación de Empresarios de Hostelería e Turismo de Lugo (APEHL). El resto del inmueble iba a ser destinado a la difusión de los recursos turísticos de la ciudad y de su entorno, además de ofrecer una solución de accesibilidad al adarve del monumento romano, con la instalación de un ascensor en su interior.

Sin embargo, el Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) tomó la decisión de anular el contrato después de que “los nuevos responsables de Urbanismo” en el Ayuntamiento de Lugo, informó el gobierno gallego en un comunicado, rechazasen el proyecto “consensuado en su momento por la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda y los anteriores encargados municipales de esa área”.

El contrato había sido adjudicado por el IGVS en diciembre de 2020 por un importe de 555.054 euros y un plazo de ejecución de ocho meses.

"Nos venía muy bien"

“A nosotros nos venía muy bien”, dijo Real, quien también reconoció que la asociación no tenía más información sobre la tramitación del proyecto y estaba a la espera de que quedasen solventados los problemas con la licencia municipal para que comenzasen las obras.

“Es una pena. Fue una propuesta que nos hicieron y, realmente, nos interesaba desplazar nuestra sede y contar con una rama de nuestra organización en el propio centro de la ciudad”, afirmó el presidente de los hosteleros.

En todo caso, Real se resiste a dar esta oportunidad por perdida. “Hay un escollo. Esperamos y deseamos que pueda ser superado y que el proyecto siga adelante”, afirmó.

Sin embargo, la Xunta de Galicia afirma que “los continuos retrasos en la tramitación de la licencia de obra, solicitada hace más de año y medio por el IGVS al Ayuntamiento, y el cambio de postura del gobierno lucense con respecto a un proyecto que había sido totalmente consensuado con él” han obligado ahora a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda a rescindir el contrato.

Recuerda, en ese sentido, que la empresa adjudicataria lleva “trece meses a la espera de poder iniciar la obra”.

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