Agromuralla dice la Ley de la Cadena Alimentaria es “una oportunidad perdida”

La asociación Agromuralla, que agrupa a unos cuatrocientos ganaderos de las provincias de Lugo y A Coruña, ha calificado como una “oportunidad perdida” para “defender a los productores” la nueva modificación de la Ley de la Cadena Alimentaria aprobada este martes por el Consejo de Ministros para adaptar la norma a la directiva europea.

A su juicio, se trata “de una oportunidad perdida más para defender a los productores e igualar fuerzas entre los distintos agentes de la cadena de producción, transformación y distribución de alimentos”.

La “parte básica y esencial en esa cadena, que somos los productores primarios, sigue totalmente desprotegida y la Administración sigue sin dar garantías legales efectivas para defender nuestro trabajo y la obtención de un salario digno para las personas que nos dedicamos a producir alimentos con los que dar de comer al conjunto de la población”, subraya en un comunicado.

En la misma línea, recuerda que la Ley de la Cadena Alimentaria fue aprobada en 2013, pero no ha cumplido “su objetivo de aportar transparencia” y “justicia” en lo relativo a “la fijación de precios en el campo”.

Se trata, recuerda, de la segunda modificación de la norma en lo que va de año, dado que en febrero, antes del confinamiento provocado por la pandemia, el Ministerio prohibió mediante decreto la venta a pérdidas tras las protestas de agricultores y ganaderos en distintos puntos de España.

Sin embargo, “la falta de vigilancia por parte de la propia Administración sobre el cumplimiento de sus propias normas, hizo que lejos de ayudar, ese cambio perjudicase a los productores, dado que provocó una modificación generalizada de contratos por parte de las industrias lácteas” en primavera y verano, para “trasladar la responsabilidad del cumplimiento de las cláusulas sobre costes de producción a los ganaderos”.

Por ello, Agromuralla vuelve a pedirle al Ministerio que “establezca con carácter objetivo, a través de un índice público variable y actualizado, los costes de producción reales de los distintos alimentos, y en concreto de la leche de vaca”.

Este colectivo lamenta que “a pesar de la aprobación de distintas normas, se siga manteniendo y fomentando la posición de poder de las industrias y de la distribución”.

Por otra parte, opina que la unificación de criterios en la Unión Europea debería servir al menos para “evitar la entrada de leche de fuera a bajo precio, principalmente de países como Francia o Portugal, porque acaba por desestabilizar el mercado español y presiona a la baja los precios en origen”.

“A partir de ahora, la llegada de cisternas de leche con excedentes de producción de otros países, a precios por debajo de los costes de producción, no debería ser legal”, concluye.