Alcoa alerta de una situación "muy difícil" en San Cibrao y pide colaboración a las administraciones

El Ministerio de Industria ha convocado para este viernes la mesa de seguimiento de Alcoa, después de que la multinacional de aluminio haya anunciado el aplazamiento de su inversión en la fábrica de San Cibrao, donde dice que espera pérdidas significativas en 2024.

En un comunicado, el Ministerio ha informado de esta mesa, que forma parte de las reuniones de seguimiento mantenidas entre el Gobierno central, la Xunta de Galicia, Alcoa y los sindicatos.

La reunión, la primera que se celebra después de que Jordi Hereu fuera nombrado ministro de Industria, estará presidida por la secretaria de Estado de Industria, Rebeca Torró.

El Ministerio ha dicho que "está en contacto permanente con la empresa y con los representantes sindicales" y que "sigue muy de cerca los compromisos adquiridos para seguir avanzando en el futuro de la empresa".

"Transparencia" y "plazos"

Por su parte, la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, ha reclamado "transparencia" a los responsables de Alcoa, así como "plazos" para retomar los compromisos pendientes después de este aplazamiento de las inversiones.

Alcoa ha anunciado que aplaza temporalmente la inversión prevista para dotar a la fábrica de aluminio de San Cibrao de un nuevo horno de ánodos.

Esa instalación figuraba en el acuerdo firmado en diciembre de 2021 con el comité de empresa para la hibernación de la planta hasta enero de 2024 y es una infraestructura capital para el complejo industrial.

La compañía ha dicho este lunes en un comunicado que informarán en la reunión de las pérdidas financieras de la factoría de San Cibrao, que incluye una refinería de alúmina y una planta de aluminio.

Lorenzana -que participó junto al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, en una reunión con varios responsables de Alcoa- dijo que la firma ha tomado esta decisión por "las dificultades" que atraviesa derivadas "del precio de energía y de los costes elevados" que, justificó, "dan lugar a pérdidas muy por encima de lo que puede asumir esta empresa".

Dos años de parón

La producción de aluminio primario se paró en enero de 2022, tras un acuerdo con los representantes de los trabajadores en diciembre de 2021.

En febrero de 2023, se acordó una modificación del acuerdo por el que Alcoa reiniciaría de manera gradual la producción de aluminio primario en enero 2024, ha señalado la compañía.

La refinería, por su parte, ha estado operando al 50% de su capacidad desde el tercer trimestre de 2022 para intentar mitigar pérdidas, pero los resultados de la planta de aluminio y de la refinería han ido empeorando, según Alcoa.

La multinacional explica que el coste de la energía a largo plazo sigue siendo poco competitivo, y se han retrasado los permisos y el desarrollo de los parques eólicos vinculados a los acuerdos de compraventa de energía (PPA) firmados por Alcoa, que también aduce entre los motivos de las pérdidas el impacto de la desaceleración económica en Europa y los precios más bajos de venta de productos.

Alcoa ha dicho que, a pesar de todo ello, ha continuado cumpliendo con el acuerdo de viabilidad, invirtiendo 65 millones de dólares (unos 60 millones de euros) en 2023.

"Soluciones a largo plazo"

La compañía explica que, cuando se firmaron los acuerdos de viabilidad, tanto el original como el modificado, Alcoa tenía fondos suficientes para cumplir con todos los compromisos, pero en las condiciones económicas actuales y futuras se necesitan "soluciones a largo plazo para hacer frente a las condiciones comerciales insostenibles en las operaciones de San Cibrao".

Por ello, pide al Gobierno de España y a la Xunta de Galicia que identifiquen "todas las formas posibles de ayuda y trabajen en colaboración para una solución a largo plazo".

El presidente y consejero delegado de Alcoa, William Oplinger, afirma en el comunicado que están trabajando para cumplir todos los compromisos del acuerdo de viabilidad, incluidas las inversiones de capital, "pero la situación actual sigue siendo muy difícil".

"Estamos decididos a continuar las conversaciones con el Gobierno y los representantes de los trabajadores de manera colaborativa, mientras buscamos una solución a largo plazo", ha concluido Oplinger.