25N
Qué pasa después de una denuncia al 016: los recursos a las mujeres víctimas de violencia machista
El 25 de noviembre se conmemora el día para visibilizar la violencia que sufren las mujeres. ¿Por qué hay mujeres que no quieren denunciar? Consultamos con una especialista
Santiago - Publicado el - Actualizado
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En Galicia hay 84 CIMs, Centros de Información a la Mujer. Están repartidos por toda la comunidad y son la primera puerta abierta que se encuentra cualquier mujer ante una situación de violencia.
En el del ayuntamiento coruñés de Coirós trabajan cuatro profesionales con Raquel Montero a la cabeza. Se trata de una psicóloga, una asesora jurídica, una educadora social y una agente de igualdad.
El primer paso para salir de la espiral de la violencia es denunciar lo que está ocurriendo. Pero, ¿Por qué hay mujeres que no denuncian? Lo primero que tenemos que saber quienes no vivimos esa situación es que no debemos de juzgar. En muchos casos, la mujer tiene miedo. Un miedo que se multiplica si tiene hijos a su cargo. Es probable que viva también en una situación de dependencia emocional o económica de su agresor. Nos lo cuenta Montero: "Hay que tener en cuenta que una mujer, cuando pone una denuncia, se lo ha pensado mucho. Tiene miedo a la reacción del agresor, a quedarse sola, a ser juzgada. Incluso a denunciar al padre de sus hijos o hijas. Muchas, además, dependen del agresor".
Lo habitual es que sea la víctima quien se pregunte qué pasará si denuncia al padre de sus hijos y cómo vivirán ellos con esa situación. Cuando, está claro que debería ser a la inversa. El agresor no se hace esas preguntas.
LA DENUNCIA, EL PRIMER PASO PARA SALIR DE LA ESPIRAL DE VIOLENCIA. Qué PASA DESPUÉS
Y, ¿Qué ocurre después de la denuncia? Solemos quedarnos con el 016. Ese teléfono es gratuito y no aparece reflejado en la factura. Pero, ¿qué pasa después?
Raquel Montero explica lo fundamental del acompañamiento: "Nosotros las acompañamos. Que no se sientan culpables en esta nueva etapa. En los centros de información a la mujer se van a encontrar con ayuda, ayuda para ellas y para los menores. Tenemos que empoderarlas de nuevo".
Y es que, tras tomar la decisión de denunciar, es vital que los profesionales que asesoran a las mujeres tengan la formación adecuada para acompañarlas y asesorarlas. También se dan ayudas económicas. Desde el propio centro se cursa la petición de ayuda. También disponen de una red de casas de acogida, además del servicio de protección, que tienen en colaboración con la Cruz Roja: "Es una telelocalización. La víctima se siente más segura a la hora de salir a la calle. Es importante que pidan ayuda. Existen recursos y herramientas que desde los CIMS se ponen en marcha para poder ayudarlas".
¿Cuál es la ayuda económica que pueden percibir las víctimas? Pues la respuesta es un rotundo depende. Y es que depende de varios factores: si tienen hijos o no, si tienen personas dependientes a su cargo, si tiene minusvalía ellas o sus hijos, si tienen algún tipo de ingreso… Desde el CIM se les tramita y después, en función de esos factores, la Xunta resuelve con una cantidad. Nos insisten los profesionales en que es importante destacar que esta ayuda se puede solicitar si no pasó más de un año desde el cese de la convivencia con el agresor. La ayuda puede ser periódica durante doce meses, una cantidad que puedes estar en torno a los 800 € dependiendo de las circunstancias de la mujer.
Y hay otra prestación económica de pago único: un único pago con una cantidad también en función de las circunstancias de la mujer, siempre y cuando tenga la orden de alejamiento en vigor.
En Galicia hay unas 5.700 mujeres en seguimiento dentro del sistema Viogen. Se identifica el nivel de riesgo: y, en función de esto, se despliega el nivel de protección de las mujeres.
Desde su puesta en marcha, en 2007, algo más de 45.300 mujeres de Galicia se han acogido a este sistema.