Ingo Volckmann: "Lo mío es un poco locura, soy un presidente un poco diferente, lo sé"

Los Premios Populares de Cope Mallorca distinguían este lunes 25 de Noviembre en materia deportiva al presidente y propietario del Atlético Baleares, Ingo Volckmann. El empresario alemán afincado en Mallorca vivió su primer reconocimiento público personal desde que asumiera el club hace una década, con este galardón que concede Cope Mallorca desde hace 45 años. Son los premios más longevos de comunicación en Mallorca, se han celebrado durante estos años de manera ininterrumpida, además.

En la Gala que tenía lugar en Molí des Comte ante 400 invitados y las primeras autoridades, con el Obispo de Mallorca Sebastià Taltavull y la presidenta Marga Prohens, así como la directora general de Ábside Media, Luisa Fernández del Viso, y el director regional de Cope, Xavier Bonet, se visionaba el vídeo de cada uno de los cinco premiados: además de Ingo Volckmann, fueron premiados en esta edición Lila, Studium, Can Company y Norberto Alcover. En esta edición de nuevo especial reconocimiento a la profesión periodística y comunicación con la distinción para los reporteros, Vicenç Matas de TVE, Torrelló de Diario de Mallorca y Tomás Montserrat de Última Hora, tres históricos de la imagen y que han inmortalizado grandes momentos también del mundo del deporte. 

Supervivencia del At. Baleares.-

Ingo Volckmann asumió en 2014 un club en quiebra, al borde de la desaparición y sin campo. El presidente recordaba cómo empezó todo, los comienzos difíciles sin apenas socios, sin casa por el cierre del Estadio Balear, sin nada: "Pude coger el campo de la Federación (Son Malferit), gracias por ello a la Federación, ahí empezó un poco la historia".

Además de escuchar al presidente, varios históricos balearicos como Virgili Izquierdo, Toni Salas y Bernat Garí, reflejaban con su testimonio cuál ha sido la relevancia según su opinión de Volckmann para la entidad. 

Toni Salas indica que "como balearico puedo decir que es una bendición que Ingo haya aparecido en el club porque salta a la vista todo lo que ha hecho. Ahora mismo aquí donde estamos, el estadio Balear, no estaríamos si no fuera por él".

 Bernat Garí cree que el presidente "ha conseguido que se vuelva a hablar de nosotros. Hubo una época en la que había gente que ni sabía qué era el At. Baleares. No sé cuántas liguillas de ascenso hemos jugado, su ilusión era, como la nuestra, subir a Segunda, no ha sido posible pero volveremos a estar arriba".

El ex presidente de la Procampo, asociación de copropietarios del Estadio Balear, Virgili Izquierdo, fue clave para que se desbloqueara la situación y se pudiera afrontar la reforma y recuperación del histórico campo: "lo que hicimos fue una gestión para que la Fundación del At. Baleares fuera la máxima accionista de la Procampo. Y en estas condiciones Ingo dijo que sí". 

Un presidente diferente.-

El propio presidente balearico reconoce que no es un presidente al uso en el mundo del fútbol, su perfil es diferente, entró en el fútbol para disfrutar como un aficionado de su equipo, pese a ser quien paga la fiesta, porque además de los socios y la publicidad, él es la fuente de financiación del club desde hace diez años, con inversiones multimillonarias. Ingo habla de una "locura" que le apasiona:

"Mis amigos me conocen y saben que estoy un poco loco, es así. Soy un poco diferente, digamos, me gusta vivirlo en la grada. Llevo también a boxeadores (su púgil, William Scull, ha se ha proclamado campeón del mundo del peso supermedio y debería pelear con Canelo Álvarez), me gusta el deporte".

Sobre su percepción sobre el club desde que decidió cogerlo hasta hoy, reconoce que en 2014 "no pensaba que sería tan grande y con tanta historia. He cogido el club para disfrutar, para vivirlo con la gente. Como mi padre, que también tuvo un club de fútbol en Alemania. Me avisaron Tolo Cursach (ex propietario) y Fernando Crespí (ex presidente), que una vez estuviera en el club la gente se animaría y vendrían muchos aficionados. Al principio piensas que vas a invertir un poco luego vas haciendo equipos para intentar estar arriba, te calientas, fichas un delantero mejor y así va subiendo todo el coste, pero vale, es la pasión, es así. Casi lo conseguimos (dos veces a punto de ascender a Segunda), luego no ha funcionado tan bien".