Niños sin hogar buscan familias que les acojan en La Rioja: "Otra oportunidad"
Nuria y su familia acogieron a Sara cuando tenía 5 años, ahora su historia sirve de ejemplo para animar a otros padres a dar el paso de ayudar a decenas de niños
Guadalajara - Publicado el - Actualizado
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89 niños en La Rioja se encuentran en familias de acogida. Una herramienta que les permite llevar una vida normal, en un entorno amigo, cuando los pilares de sus familias biológicas se han desmoronado. Son niños y niñas que, por sus circustancias, han necesitado de otras familias para salir adelante. Nuria es una de ellas, hace años decidió tomar una de las decisiones más importantes de su vida: Acoger a Sara, una niña que, entonces, tenía 5 años y, de pronto, se había quedado sola. Nuria asegura que "sobre todo nos ha cambiado que en vez de dos hijas, tengo tres", explica, "pero también la satisfacción de estar creciendo con ella".
Nuria tiene dos hijas biológicas, que fueron clave para tomar la decisión de integrar a Sara en la familia. Su hija isabel era compañera de clase de Sara y fue ella la que advirtió a la familia de que Sara necesitaba ayuda. Este gesto les permitió integrarse en el plan de familias de acogidas: "La promotora fue mi hija Isabel, iba a clase con ella en infantil y un día vino llorando porque se habían llevado a su amiga a un centro de acogida", explica Nuria, que rapidamente se pusieron a "dar palos de ciego" para averiguar dónde estaba Sara y ver cómo podían ayudarla.
Las familias que se unen a la bolsa de familias de acogida reciben una ayuda extra para mantener a los niños
Esos palos de ciego la llevaron a presentarse frente a la Consejería de Políticas Sociales, fue la propia Sara, con solo 5 añitos, la que promovió que a Nuria la dejaran tomar contacto con ella: "Dibujó una niña y puso el nombre de Isabel, que es mi hija, y nos dejaron tomar contacto con ella". En ese momento, la familia de Nuria solo pretendía "mostrarle a ella que alguien la quería y que estábamos allí para lo que necesitase".
Acogerla terminó saliendo solo. Para seguir teninedo vínculo con ella decidieron meterse en la bolsa de familias de acogida y dieron el paso de común acuerdo entre toda la familia. Una decisión que Nuria anima a que valoren otras familias.... precisamente, el Gobierno de La Rioja, ha hecho un llamamiento sobre esto porque "hay muchos niños que lo necesita, muchos que necesitan otra oportunidad". Ante los miedos que puedan surgir, Nuria, asegura que todo es "más natural de lo que nos pensamos, al final es un hijo más con sus gratificaciones y sus disgustos".
Acoger a una niña es una decisión difícil y en muchos casos la principal barrera es económica o el miedo a no poder darle la atención que merecen... Sin embargo, las familias acogedores cuentan con un proceso de acompañamiento y apoyo además de una ayuda básica de 415 euros al mes que les ayuda con algunos de los gastos. Si le preguntas a Sara, tiene claro que solo puede mostar agradecimiento a su familia de acogida.
Una familia a la que, por cierto, y siendo ya adulta, pidió que la adoptasen. Fue su forma de agradecer que gracias a ellos había tenido una oportunidad. "Felicidad", es lo que dice Sara cuando le preguntas, y antes "mucha falta de atención". Sobre todo lo que ha conseguido es "nuevas oportunidades".
Historias de amor como la de Nuria y Sara se repiten cada año en La Rioja y en toda España, pero es necesario más implicación de familias como la de Nuria. Cualquier tipo de familia puede acoger a una niña como Sara y cambiarle la vida.