Santos Montoya: "El mensaje tiene que ser accesible incluso para quienes no se consideran creyentes"

El obispo de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, Santos Montoya, en su mensaje de Navidad a la sociedad riojana, apela a que "nos pongamos a la altura del belén y hagamos posible su mensaje".

En un vídeo difundido por la Diócesis de Calahorra-La Calzada y Logroño, Santos Montoya afirma que "parece mentira que esta escena, la del belén, haya transformado de forma definitiva la historia". "Parece mentira que el acontecimiento por excelencia, la encarnación de Dios, haya pasado desapercibida en los primeros comienzos", añade.

Alude al nacimiento en el belén y pide que "dejemos abierta a Dios la puerta de nuestra libertad para que él, hacia nosotros, nos transforme conforme a su querer amoroso". Por ello, "pongámonos a la altura del belén y hagamos posible su mensaje. Feliz Navidad", señala el obispo.

En los micrófonos de COPE Rioja, el obispo Santos Montoya, explica sobre la escena del Belén que "los niños son los que mejor entienden esto, ponerse a la altura, como normalmente suelen estar a la altura de las figuras del Belén, a la altura de la humildad de Dios. Entonces son los que mejor ven la mejor perspectiva".

"La intención era esa, ponernos a la altura del Belén, reconocer su mensaje y mostrar luego con nuestra vida eso que hemos contemplado", añade el obispo riojano.

ESPERANZA Y ALEGRÍA

"Estamos en Navidad, momento para la esperanza y la alegría", continúa, "se pueden tener desencuentros en tiempo de Navidad. Otra cosa es si hay razones para superar esa realidad, para entender que las cosas pueden ser de otro modo. Con lo cual, el Belén lo que nos está animando es a la verdadera alegría que brota de lo que ha ocurrido y de lo que podemos vivir".

"Puede ser un contrasentido hablar de Feliz Navidad cuando una persona lo está pasando mal, porque parece que la Feliz Navidad es siempre cuando las cosas te vayan bien pero la realidad es más grande. La Navidad es feliz porque en sí mismo la natividad es que Dios se haya hecho carne, ese es el motivo de la alegría. Una persona enferma, una persona con dificultades, del estilo que sea, puede decir también Feliz Navidad", concluye Santos Montoya.

Con un "deseo sincero de llegar a todos", Santos Montoya, explica que "la palabra de Dios, depositaria en la Iglesia, es la que abraza a todos y la intención es hacer el mensaje accesible aunque no se sientan creyentes, todo el mundo quiere que lo traten con cariño, que lo vean bien, que perdonen los errores. Yo creo que este mensaje sintoniza con el corazón humano y este es el mensaje que nosotros transmitimos. Luego seremos más o menos torpes a la hora de hacerlo, pero el hecho en sí, el mensaje en sí, es entusiasmante. Ojalá lo sepamos hacer".

Sobre los conflictos bélicos, el obispo de la Diócesis de Calahorra y La Calzada- Logroño, señala "¿qué hacemos para solucionar esos conflictos y qué hacemos para mantener esa paz?, somos responsables y las cosas no están ganadas para siempre. Hemos de pelearlas constantemente para mantenerlas. Es como la forma física".

"Uno de los mensajes del Belén es la verdad. Independientemente de la postura política, social, religiosa que se tenga, al final la verdad la entiende todo el mundo. Y todo el mundo entiende cuándo se dice una cosa y cuándo se dice otra. Yo creo que somos deudores de la verdad y es la que nos hace libres y la que nos hace crecer. Si no correspondemos con esa verdad, pues la convivencia se deteriora, ciertamente", concluye Santos Montoya.