INVIERNO
Cómo funciona el protocolo por nieve en La Rioja: Por encima de los 600 metros
Se activa el Plan de Vialidad Invernal 2024-2025. Con 1.500 kilómetros de carreteras en La Rioja, el 40% supera los 600 metros de altitud
Logroño - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
El invierno llega oficialmente el 21 de diciembre y La Rioja ya se prepara para la llegada de la estación más fría del año. Se activa el Plan de Vialidad Invernal 2024-2025, diseñado para garantizar la seguridad de los conductores frente a las condiciones adversas típicas de la temporada. Con 1.500 kilómetros de carreteras en la región, de los cuales el 40% supera los 600 metros de altitud, las actuaciones preventivas son clave, especialmente en áreas montañosas y puertos como Sancho Leza, Peña Hincada o Piqueras.
El dispositivo cuenta con más de 100 profesionales, entre operarios, teleoperadores y coordinadores, además de una flota de una treintena de vehículos especializados, incluidos quitanieves. Este equipo se refuerza con colaboradores locales, como Iñigo Capellán, quien, desde su tractor, contribuye a limpiar las carreteras y asistir a conductores en apuros. Cada invierno se emplean entre 1.500 y 1.700 toneladas de sal y fundentes, distribuidas estratégicamente desde los 10 silos ubicados en puntos clave como Logroño, Torrecilla en Cameros o Valdezcaray.
PROTOCOLO
El protocolo de actuación se activa de manera progresiva según la intensidad de las nevadas, priorizando las vías principales y los accesos a las cabeceras de comarca. Para los ciudadanos, se recomienda seguir los canales oficiales como la Dirección General de Tráfico (DGT) para informarse del estado de las carreteras y extremar la precaución. Elementos como cadenas, agua y una manta en el coche pueden marcar la diferencia ante imprevistos.
En La Rioja, las estadísticas de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) revelan entre 10 y 15 días de nieve al año en las zonas bajas, mientras que en áreas montañosas esta cifra puede superar los 30 días. Y aunque el frío y la nieve traen desafíos, también ofrecen paisajes de ensueño que inspiran a quienes, como Iñigo, madrugan cada día para mantener las carreteras despejadas y seguras.