Llega el otoño y tienes alergia ¿Por qué?

La primavera es la época en la que todos pensamos que aparecen más síntomas de alergias, pero el otoño representa para millones de personas una agudización de la sintomatología

Andrea Delgado

Pamplona - Publicado el

2 min lectura

      
      
             
      

Aunque la primavera es la época en la que todos pensamos que aparecen más síntomas de alergias, la estación de otoño representa también para millones de personas una agudización de la sintomatología

los ácaros: alergias de otoño

La llegada del otoño trae consigo la bajada de temperaturas y, por tanto, un mayor uso de la calefacción en los hogares. La menor ventilación, junto con el aumento de la humedad ambiental, crean la situación perfecta para la proliferación de los ácaros del polvo.

"Desde agosto se empiezan a dar las condiciones, sobre todo en el norte de España, más humedad, no hay temperaturas extremas, la bajada de temperaturas", explica la alergóloga de la CUN, Maria Jose Goikoetxea. 

Los síntomas habituales son la rinitis, picor de ojos, o tos asmática.

cambatir los ácaros

Es importante la limpieza de la casa con filtros EPA en las en los aspiradores. Poner fundas de colchón y de almohada antiácaros, retirar edredones de plumas, o cosas que van a generar el crecimiento de los ácaros como peluches o cojines. "Las mascotas son otro problema porque generan pelo que es un foco de crecimiento de los ácaros también", explica Goikoetxea.

Además, para quienes desarrollan los síntomas están los antihistamínicos, los aerosoles para momentos puntuales y si con esto no se controla entran en juego las vacunas.

      
             
      

más alergias de otoño

En el caso de los niños, con la vuelta al cole, la alimentación en comedores escolares, asistencia a cumpleaños infantiles o compartir comida con los compañeros, son situaciones de potencial exposición a alérgenos.

Alergias a mascotas, en este caso por los ácaros y los hongos, el descenso de las temperaturas hace que permanezcamos más tiempo en casa, y que, por ello, sea más probable que aparezcan alergias a los epitelios de estos animales.

Y por último la Dermatitis atópica. El otoño en sí mismo no tiene por qué empeorar sus síntomas, pero el regreso a la ciudad después del verano, el uso de lana o el frío, entre otros factores, suele provocar que la dermatitis atópica vuelva a manifestarse de forma más aguda.

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