Reto de la inmigración: "Tenemos que llegar a esa convivencia"

La integración y la convivencia son los principales retos de la inmigración en Navarra. Y eso lo saben bien en Fitero.

Fitero cuenta con alrededor de un 20 por ciento de población migrante, según los datos del Ayuntamiento. La localidad ribera tiene una realidad diferente a otros pueblos de Navarra pero similar a Corella o Castejón, con un alto porcentaje de población extranjera entre sus vecinos.

Una de las peculiaridades de Fitero es que las personas migrantes son jóvenes y las autóctonas mayores. Por eso, el 73 por ciento del alumnado del colegio es de origen o de ascendencia magrebí. 

Con esta realidad, todavía es difícil la integración total, según María Antonieta Berdonces Técnica de convivencia de Fitero. “Hasta ahora lo que hemos hecho ha sido coexistir, en un mismo espacio, sin demasiados problemas, pero coexistir. Tenemos que llegar a esa convivencia”, reconoce.

Para conseguir esa convivencia, la localidad cuenta con un Plan de Convivencia que tiene varios ejes como urbanismo, educación, empleo o mujer, entre otros. El plan consiste en coordinar todos esos servicios. “A partir de ahí vemos lo que ocurre en cada parte. En educación, intentamos trabajar mucho con las familias. Al trabajar mucho con las familias, trabajamos con las mujeres que van a alfabetización. Y a través de eso nos podemos dar cuenta de cosas que ocurren a nivel de salud”, asegura.

Trabajar de una forma coordinada, evitando duplicar acciones y viendo todo desde diferentes puntos de vista, es más fácil conseguir el desafío de la integración.

Por otro lado, hablamos de otro reto: el empleo. El trabajo es la puerta a muchos otros retos, "con el mundo laboral conseguimos un montón de cosas. Vamos a conseguir no solo tener la salida económica que necesitas... vas a conseguir relacionarte con las personas de aquí, con otras familias... vas a conseguir esa integración y esa convivencia", insiste.