Las instituciones negocian con inversores vascos para salvar la planta de Guardian en Llodio
El PP acusa al Gobierno vasco de "inacción" por no haber actuado antes pese al "goteo" de cierres industriales en el Valle de Ayala
Vitoria - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Las instituciones vascas negocian con inversores de Euskadi para mantener la actividad en la empresa de vidrio Guardian Llodio, que el pasado miércoles inició el apagado de su horno. Se trabaja a contrarreloj para evitar que la marcha de la multinacional estadounidense acabe con el empleo de los 171 trabajadores de la planta alavesa.
La diputada de Desarrollo Económico e Innovación de Álava, Saray Zárate, ha confirmado este jueves que ya hay contactos con empresarios de Euskadi interesados en mantener la vida de la fábrica. "Lo positivo es que son inversores locales, lo que refuerza nuestro compromiso con la industria de la región".
futuro del horno
La diputada ha destacado que se ha acordado con los máximos responsables de Guardian hacer un enfriamiento planificado del horno deteriorado, lo que permite que este instrumento vital pueda recuperarse en un futuro, algo que no hubiera sido posible si se hubiese parado de forma inmediata.
Zárate ha señalado que aunque la opción ideal para los trabajadores hubiera sido mantener el horno en funcionamiento, "la empresa es la que decide", y el proceso de enfriamiento es una opción "viable" que "deja la puerta abierta" a que otro inversor se haga cargo de la planta en el futuro.
goteo de cierres
El PP critica que haya ahora prisas por encontrar un socio industrial que mantenga la actividad de la planta cuando el "goteo" de cierres en el valle de Ayala ha sido incesante.
Iñaki Oyarzabal, presidente del partido en Álava, ha denunciado que el Ejecutivo autonómico ha "incumplido" el Plan de Actuación de Aiaraldea, lanzado en 2022, cuyo objetivo era la modernización industrial y la recuperación de suelos industriales.
Su dotación era de 24 millones de euros, pero solo se han utilizado algo más de 7 millones de los 9,5 millones destinados a la modernización y recuperación de infraestructuras. Así consta en una respuesta parlamentaria del consejero de Industria del Gobierno vasco, Mikel Jauregi, cuya comparecencia en la Cámara vasca ha solicitado el PP.