IMANOL ALGUACIL

La dura escuela de Imanol

Imanol Alguacil aplica una política de dureza especialmente con los jóvenes talentos de la Real Sociedad

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Imanol Alguacil, conocido por su carácter exigente, no titubea a la hora de emplear métodos contundentes en su gestión del equipo, recordando los tiempos en que una reprimenda severa era la norma. Un ejemplo claro de su estilo directo se manifestó en el incidente con Traoré en el Parque de los Príncipes, donde sentenció: «Si un jugador deja al equipo con uno menos es porque tiene que ir al hospital».

Adnan Januzaj, otro de sus habituales objetivos, también sintió la severidad de Alguacil, incluso después de no vestir más la camiseta txuri-urdin. Imanol declaró: «Intenté sacar lo máximo, pero se nos cayó por el camino, solo con talento no vale». Esta frase se hizo eco en octubre de 2019, cuando desmintió públicamente que Januzaj fuera una "estrella" para él durante una rueda de prensa.

Exgiencia a la cantera

Sin embargo, los jóvenes canteranos son quizás quienes enfrentan el mayor rigor. Contrario a lo que muchos podrían esperar, Alguacil opta por una política de mano dura. Bajo su tutela, la resistencia a la presión es un filtro innegociable para continuar en el primer equipo.

Jon Martín, reciente promesa y renovado hasta 2030, fue comparado con Cubarsí justo después del anuncio de su contrato, demostrando que el elogio no tiene lugar fácil en la filosofía de Alguacil. En un tono similar, Jon Pacheco, otro internacional juvenil, recibió críticas duras por parte del entrenador, quien comentó que le sería difícil jugar en Primera si no mejoraba significativamente.

Los jugadores cedidos tampoco escapan de esta retórica, como muestra el comentario sobre Robert Navarro, a quien se le recordó su situación en Cádiz y la falta de minutos, pese a las expectativas de algunos.

Finalmente, Beñat Turrientes reconoció la diferencia entre la gestión de Alguacil y otros entrenadores como Xabi Alonso, destacando la alta exigencia comparada con un enfoque más relajado. Este reconocimiento no solo resalta la disciplina de Imanol, sino que también subraya una cultura de rendimiento y responsabilidad personal dentro del equipo.

La filosofía de Imanol Alguacil, marcada por la rigurosidad y la demanda constante, plantea un debate sobre la efectividad y las consecuencias de tales métodos en el desarrollo de jóvenes talentos. ¿Es esta dureza la clave del éxito o podría, en cambio, frenar el potencial de los futuros canteranos? Paraece que los éxitos recientes dan la razón al patrón de Orio.