VIDA SOLIDARIA
La labor incansable de sor Begoña, la religiosa de Bilbao que sigue al pie del cañón a sus 81 años
La hermana de la Caridad ayuda desde 1988 a los más necesitados del bilbaíno barrio de Arangoiti, marcado por la inmigración y donde ha creado una "familia"
Vitoria - Publicado el - Actualizado
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El barrio de
, en Bilbao, encierra una historia de resistencia como la de la propia sor Begoña Agirrezabal, que a sus 81 años sigue al pie del cañón solidario.
La colina pasó de albergar un palacio y varios caseríos a mantener en pie uno mientras iniciaba su
. Entonces comenzaron a llegar inmigrantes de otras comunidades, ahora proceden de otros países.
, como se conoce a esta hermana de la Caridad,
junto a la red de voluntarios que ha ido tejiendo, integrada por "jóvenes estudiantes y mayores jubilados".
como la apodan con cariño- al remontarse a
obrero pegado a Deusto de a mano de la Asociación Luisa de Marillac.
Más de tres décadas de dedicación reconocidos por la Fundación Antonio Menchaca con uno de sus Premios a la Solidaridad.
En esos años se multiplicaban los problemas con las drogas y el sida. Faltaban la ayuda a domicilio y los bancos de alimentos. No existían. Así que la labor de personas como sor Begoña era fundamental. Y más en barrios empobrecidos como el de Arangoiti en el que no había ambulatorio y a donde los taxis se negaban a ir.
Tal era la necesidad de personas con discapacidad intelectual, ancianos que vivían solos o toxicómanos, entre otros, que
Aissa asegura que "no hay palabras" para describir lo que la hermana a hecho por ella, "es como una madre".
Son algunas de las dedicatorias que suscita "Sorbe" entre quienes ayuda, parte de la
y que ha sido retratada en una
en las paradas Moyúa, Deusto y Casco Viejo de
Hay banquillo
Las necesidades no cesan y el ingenio tampoco. La última iniciativa solidaria de la Asociación Luisa de Marillac es convertir tu paraguas roto en una bolsa y por cada una vendida entregar 6 litros de leche a familias con necesidades especiales de Arangoiti.
Tampoco se agota el banquillo: "tengo un relevo que es una maravilla".