Qué destinos vacacionales te impiden donar sangre en unos meses

La sangre ni se compra, ni se vende. No se puede fabricar, por lo que necesita de la solidaridad de los donantes y también en fechas especiales sigue siendo fundamental su papel para quienes necesitan transfusiones, plaquetas o cualquier de sus elementos. Por eso, desde los centros de hemodonación insisten en la importancia de captar gente joven para su causa.

Las condiciones son sencillas. Vale básicamente con tener entre 18 y 65 años y estar bien de salud, aunque hay otras circunstancias que hay que tener en cuenta. No se puede ser donante si se ha hecho un tatuaje reciente o un pendiente. En este supuesto deben esperar unos cuatro meses.

También hay que tener una cosa en cuenta al volver de las vacaciones. Todos los potenciales donantes pasan una pequeña entrevista antes de donar, pero es bueno saber que hay destinos vacacionales que invitan a esperar unos meses por la opción de haber contraído algún tipo de enfermedad en ese periodo.

Lugares exóticos

El doctor en su cuestionario preguntará por los destinos de los últimos viajes y como explica Toñi Gómez, hay algunos que hacen aconsejable esperar un tiempo. "Si han ido al sudeste asiático, a países del cono sur como en Latinoamérica, hay que esperar seis meses desde la vuelta porque son sitio donde hay malaria y otras enfermedades". Luego se le realizarán pruebas.

LA MEDICACIÓN

Otra cuestión importante para los responsables del centro de Hemodonación es que los interesados no se autodescarten por estar tomando medicación. Si hay dudas hay opción de preguntar. "Si se toman antibióticos, deben pasar quince días desde la última toma, pero no por el fármaco en sí, sino por la infección que puede haber detrás".

Sin embargo, se puede donar con tratamientos crónicos para la tensión y la diabetes. Es el mismo caso del tratamiento para el eutiroidismo. "Es recomendable que pregunten, pero en casi todos los casos vamos a animarles a donar sin problema".

Especialmente animan a los dudosos, porque el verano, al igual que los festivos, son fechas complicadas para tener las reservas a tope, a pesar de que hacen campañas específicas y mandan unidades móviles por todo el territorio para conseguir facilitar la labor de quienes no se han decidido a acudir a los lugares habituales.

Con cada donación se salvan tres vidas. Hay enfermos que las necesitan a diario y también cumplen una función vital en el caso de accidentes de tráfico, entre otras muchas opciones.