Del hospital DE LA PAZ (MADRID) AL COMARCAL DEL Noroeste

“Vuelvo al Hospital de Caravaca para estar más cerca de mi gente”

El prestigioso cirujano Raúl Sánchez ha dado un giro a su vida: regresa a su localidad natal después de 15 años en La Paz y 60 trasplantes de corazón infantiles. “El futuro está en los hospitales pequeños”

Javier Herráiz

Murcia - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

      
      
             
      

He trabajado en un hospital maravilloso y me voy a otro que también lo es”. Es lo que nos empieza diciendo Raúl Sánchez, ya instalado en Caravaca de la Cruz, después de 15 años trabajando como cirujano infantil en el hospital de La Paz, en Madrid. 

Asegura que este cambio radical en su vida obedece a tres razones: “”He pasado una etapa en la que me he vaciado durante 15 años a un ritmo fuerte donde he aprendido muchísimo, también volver a mi tierra para cuidar a mi gente, mi familia y mis raíces, pero no cuando vaya a jubilarme sino cuando queda un poquito de energía, y luego poder cuidar de mis padres ya octogenarios y de uno mismo, coger un ritmo un poco más tranquilo.

En la paz quedan muchos vínculos con los niños y sus familias

Preguntado por lo que ha dejado en el hospital de La Paz, Raúl explica que"""allí han quedado  pacientes y sus familias, además de compañeros maravillosos. Lo que más me ha costado es despedirme de pacientes porque cuando operas a un niño ya te une para siempre una vinculación con ese niño y sus familias. Lo que más me ha costado ha sido despedirme de ellos. Cuesta salir de estos macrohospitales porque son niños de muchas partes de España y del mundo. He dirigido unos 15 trasplantes, pero habré participado en más de 60. Las experiencias y vivencias las he plasmado en un libro titulado “No somos héroes” que me ha servido para cerrar una etapa y sacar el quirófano a la sociedad, algo que se debe hacer para quitar miedo a la opinión pública".

Los pacientes de Caravaca, igual de importantes

“”Los pacientes de Caravaca son igual de importantes. Habrá que hacer una pediatría general, pasaremos una consulta de cardio infantil y lo que necesiten mis compañeros. Cuando llegas el último tienes que colocarte el último y ponerte al servicio de los demás. Lo primero que hay que hacer es escuchar, sentir, palpar y observar, y luego la vida irá poniendo cada cosa en su lugar. Ahora no me atrevo a decir qué hay que cambiar en el hospital, pero la sensación es buena, hay mucho compromiso y un sistema muy potente“”

El futuro pasa por hospitales pequeños

“”La medicina de ahora es comunitaria: no es PARA el paciente, sino CON el paciente. Desde arriba no debemos poner cosas porque eso no perdura en el tiempo. Por eso creo que el futuro está en hospitales como el comarcal del Noroeste de Caravaca. Los hospitales grandes no van a desaparecer, pero va a haber un movimiento en un futuro de ir de lo grande a lo pequeño, a lo sencillo, porque también permitirá el cuidado de los propios sanitarios; para cuidar al otro primero tienes que cuidarte tú“”