Las consecuencias del Congreso de Vistalegre II

Las consecuencias del Congreso de Vistalegre II

José Melero Campos

Publicado el - Actualizado

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Los resultados electorales de 2016 dejaron a Podemos muy tocado. La unidad en torno al líder, Pablo Iglesias, se resquebrajaba por momentos, permitiendo el auge del sector errejonista, que aspiró a tomar las riendas de la formación morada en el II Congreso de Vistalegre, celebrado en febrero de 2017.

Pese al ruido generado por Errejón y sus seguidores, fueron derrotados de manera contundente. Iglesias, que representaba el ala más radical de PODEMOS y la vuelta a la izquierda más tradicional, continuaría controlando, aún más si cabe, la dirección de Podemos. Tanto es así que días más tarde, relevó a Errejón como portavoz morado en el Congreso de los Diputados. Dejaría de estar a la derecha de su jefe. El cargo pasaría a ocuparlo Irene Montero.

Errejón quedaría relegado a la segunda fila del grupo, en el lugar que hasta entonces ocupaba otra mujer fuerte del partido hasta entonces, Carolina Bescansa, que fue relevada de todos los órganos de dirección. Los errejonistas quedaban así desterrados a las últimas filas de la Cámara Baja. 

 Lo máximo a lo que podía optar Errejón era a liderar la candidatura de Podemos a la Comunidad de Madrid en las elecciones autonómicas del 26 de mayo de 2019.

El Congreso de Vistalegre puso fin a la división interna, pero ello no conllevaba unas mejores perspectivas electorales. Más bien al contrario. Podemos abandonó la transversalidad que había caracterizado a los morados, gracias en buena medida a la mayor moderación de Íñigo Errejón. Así las cosas, el primer CIS de 2018, un año después de la celebración del Congreso, situaba a Podemos en el cuarto lugar, con el 18% de los sufragios. Una caída en las encuestas que vino motivada por la solución de Podemos de celebrar un referéndum para atajar el conflicto catalán.

Pese a que públicamente Unidos Podemos daba sensación de unidad, los socios de IU exigían renegociar el acuerdo marco de la coalición para recuperar la agenda social de la izquierda, tras meses marcados por separatismo catalán.