En 'EL ESPEJO'

Presentamos el libro “Teología de ojos abiertos”, del jesuita Gabino Uríbarri Bilbao

Una publicación de la editorial Sal Terrae en la que G. Uríbarri reflexiona sobre cómo evangelizar de un modo lúcido, incisivo y fecundo.  

Amparo Latre

Publicado el - Actualizado

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El autor de “Teología de ojos abiertos”, de la editorial Sal Terrae ha señalado en 'El Espejo' que no es una teología centrada en los problemas intrateológicos, sino que mira directamente a la evangelización, a la pastoral y a la cultura; esa unión de doctrina, cultura y teología y evangelizción es a lo que el título alude".

El jesuita Gabino Uríbarri, Catedrático de Teología en la Universidad Pontifica de Comillas y miembro de la Comisión Teológica Internacional ha explicado que la Compañía de jesús se fundó con el propósito de ayudar a las personas en su vida de fe y por tanto esa mirada pastoral a la vida de la gente está presente en la orden religiosa desde sus orígenes.

En su último libro presenta los desafíos que la cultura actual plantea a la teología. En este sentido ha dicho que si bien es cierto que hoy existe una creencia y búsqueda religiosa, también lo es que se trata de una "busqueda sincretista": "La gente no quiere el paquete completo que ofrece el Catolicismo, sino que picotea de aquí y de allá y eso es una dificultad. Por otra parte, la creencia se da buscando mucho el bienestar emocional, subjetivo e inmediato. El criterio de verdad es cómo me siento. Esta subjetivización fomenta el relativismo que plantea enormes desafíos a la evangelización".

En este sentido, "el libro muestra qué elementos de la cultura actual podemos aprovechar para presentar la fe sin falsear la propuesta y a la vez qué trampas nos encontramos en las que no podemos caer".

Gabino Uribarri también se ha referido al estrés que parece caracterizar esta época: "Una de las cosas que dicen muchos analistas es que es una sociedad que genera mucho estrés y mucha angustia y en este contexto se aprecia mucha búsqueda de salvación y una demanda".

"¿Cómo ayudamos a la gente a vivir salvación en una sociedad que genera estrés? ¿Qué recursos tenemos cómo ayudamos?", se ha preguntado el autor.

Otro de los grandes retos es cómo generar una verdadera comunidad cristiana en una cultura individualista. "Este es uno de los principales retos -ha dicho-, porque no se genera adhesión a un grupo. Por eso es importante el cultivo de la memoria a través de grandes personajes que han vivido la fe y son referentes.Grandes testigos, que pueden ser gente cercana, como los abuelos". 

Por último G. Uríbarri ha explicado que ni el relativismo ni el fundamentalismo son propios de la fe cristiana. "El relativismo porque viene a decir que todas las opciones son iguales y buenas siempre que causen bienestrar, pero nosotros pensamos que hay una revelación de Dios en Jesucristo. Y el el fundamentalismo porque es una postutra del que se enroca y no se atiene a razones. Nosotros vivimos una fe abierta a la razón y al diálogo".