"Los protocolos son necesarios, pero no son la varita mágica. Hay que atender individualmente a las víctimas"

Su coordinador, el profesor Miguel García Baró, ha explicado en 'El Espejo' que se trata de un servicio gratuito, en el que atienden a cualquier persona que haya sido víctima, sin importar sus creeencias o circunstancias personales: “Queremos poner el acento en la prevención pero, dada la situación, también es importante reconocer los casos, incluso los que hayan prescrito". 

“Hay que reforzar la formación afectiva y antropológica de instituciones -ha dicho- y hay que llegar a más personas, porque la enfermedad de la que hablamos está extendida a toda la sociedad y la Iglesia quiere llegar a toda la sociedad, superando una actitud reactiva”.

"Repara" ofrece atención psicológica, psiquiátrica y jurídica con un equipo interdisciplinar que cuenta también con especialistas en escucha y en duelo.

Miguel García Baró ha contado que como creyente está muy contento de que este proyecto sea una realidad, porque ofrece una respuesta valiente ante un problema que entristee y escandaliza a muchos.

El profesor de la Universidad de Comillas ha señalada que queda mucho trabajo por delante pero lo afronta con ilusión y con la certeza de que puede ayudar a muchas personas. "Si bien los protocolos son imprescindibles -ha dicho-, no son la varita mágica. Hay que atender individualmente encontrando el equilibrio entre lo que la víctima necesita y lo que puede recibir".

El "Proyecto Repara" ha nacido impulsado por la Archidiócesis de Madrid y puede servir de inspiración y referente en otras diócesis.