“Me niego a conformarme con quedarme en silla de ruedas”

Todo empezó con un temblor en las piernas. Cada vez que bajaba del camión a estirar el cuerpo tras varias horas al volante, Chema notaba como sus piernas se sacudían sin control durante un largo minuto de forma inexplicable. A eso se unió más tarde la visión doble. Y luego la falta de sensibilidad a las temperaturas.

Chema tiene 41 años, vive en Murcia, y hace cuatro le diagnosticaron esclerosis múltiple… Hasta ese momento, se dedicaba a hacer rutas internacionales con su camión. Ahora tiene concedida la incapacidad completa y camina con andador cuando no está sentado en una silla de ruedas.

Chema, que vive en Ceutí (Murcia), acude a sus sesiones con fisioterapeutas y neuropsicólogos… pero sin duda su cita semanal favorita es la que tiene con el exoesqueleto.

“Es una sesación brutal”. Con estas palabras describía Chema en Fin de Semana con Cristina la experiencia al volver a estar erguido en este esqueleto externo. “Te lo atan al cuerpo, a las piernas, a la espalda… y parece que has crecido. Estás de pie, totalmente recto y parece que soy un palmo más alto que el fisioterapeuta”. Chema llega a caminar 1.000 pasos en 45 minutos de sesión. “Tengo esperanza de quitarme el andador y de quitarme la silla de ruedas. Tengo que seguir peleando”.