"Si ayer todos hablaban de Errejón, hoy la comidilla es el fotón de Pedro Sánchez con el empresario corrupto Víctor Aldama"

La directora de Fin de Semana aborda la noticia política de la semana y otros asuntos de actualidad

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¡MUY BUENOS DÍAS ESPAÑA! Solo faltabas tú, este es tu programa, Fin de Semana de la cadena COPE, y este es tu equipo. Te saluda Cristina López Schlichting en nombre de todos los que te entretenemos e informamos sábados y domingos. Son las diez, atención, han cambiado la hora. No te despistes que luego se hace uno un lío con las citas y las agendas. Cambia los relojes analógicos. 

Y qué bajón de temperaturas y cuánta lluvia por toda España. Jorge Olcina nos avanzaba ayer los detalles de esta semana húmeda que empieza mañana.

Tendría que felicitar esta mañana al Peli, Diego González, nuestro capitán de equipo por esa goleada de los culés al Real Madrid. Cuatro balonazos en el Bernabéu, qué barbaridad. Se quedó ayer corto Paco González en el programa. Pero oye, no manda en la actualidad el triunfo del Barcelona, ¿Cómo es posible que la decadencia de Pedro Sánchez nos dé titulares más llamativos que el fútbol?

Si ayer todos hablaban de Errejón, hoy la comidilla es el fotón de portada del diario El Mundo. Pedro Sánchez con el empresario corrupto Víctor Aldama. Nos había dicho el presidente que no lo conocía, que no sabía quién era el amiguete de su Ministro Ábalos. Pues aquí están, abrazados y sonrientes, en el acto de presentación de Pepu Hernández a las primarias de Madrid. Era 2019 ojo, hace nada menos que cinco años. La foto la tomó el propio conseguidor Koldo García.

Rápidamente han salido los botafumeiros a decir que el presidente, como todos los famosos, sale en las fotos de toda España y que ni se entera de con quién se fotografía. Vale, pero es que la pregunta no es ésa. ¿Qué hacía Víctor de Aldama en la zona VIP del acto? Repito, hace cinco años y ya estaban Aldama y Koldo en el entorno de confianza.

Feo asunto en un momento en que a Pedro Sánchez le crecen los enanos. Empresarios enchufados que obtenían rescates y dinero público, ministros que se enriquecían con las mascarillas de la pandemia y a los que contrataban Armengol en Baleares y el Gobierno de Canarias. Su ministro Ábalos haciendo de correveidile de los sinvergüenzas de Venezuela, que acompañaban a Delcy Rodríguez a vender sus lingotes de oro fuera del país. La mujer del presidente enchufada en la Universidad sin título y recibiendo en Moncloa a los que pedían los favores.

Los socios de gobierno encubriendo las fechorías de un obseso sexual que llevaba años haciendo tocamientos a mujeres. Hace año y medio que Errejón tocó el trasero a una joven en un festival de Castellón y desde entonces Más Madrid lo tapaba. ¿No lo sabían los de Sumar, desconocía Yolanda Díaz el rumor a voces? Venga hombre.

Y ahora, fotos con el cabecilla de la trama Ábalos. ¿Cuánto van a encajar los votantes del Gobierno?

Porque, mientras tanto, Pedro Sánchez sigue regando con prebendas a los nacionalistas para hacer equilibrios y mantenerse en el Gobierno. Y de eso no hablamos, y eso nos perjudica a todos. Ayer se hizo pública la fecha para la reunión bilateral con el gobierno vasco. El 6 de noviembre Sánchez recibirá al lehendakari Pradales para hacer efectivas las transferencias comprometidas con el PNV, a saber, la gestión económica de la Seguridad Social y el traspaso de competencias a la Ertzaintza desplazando a la Guardia Civil en infraestructuras críticas como puertos y aeropuertos vascos.

Y Carlos Puigdemont vuelve a ser cabeza de Junts y se presentará a las elecciones. El que decía que dejaría la política si no ganaba, como ocurrió. Vuelta la mula al trigo. Qué cansinismo de legislatura por favor. Turull presentó ayer la candidatura única del Congreso de Junts y hoy será proclamado el de la peluca hirsuta tras una votación telemática de mero trámite de las bases. A mediodía comparecerá el propio fugado a anunciarnos su regreso. Por favor, es el día de la marmota.