​"Nada nuevo en Venezuela, Edmundo no pudo entrar y la tiranía de Maduro continúa"

¡Muy buenos días España! Te saluda todo el equipo de Fin de Semana y Cristina López Schlichting al micrófono, bienvenido a este viaje en que vamos a aprender, entretenernos juntos y divertirnos. Es 11 de enero, ya estamos en plena cuesta, ahorrando lo que no ahorramos, sacando en rebajas lo que necesitamos y comiendo menos, que la media son tres kilos de turrones en las caderas.

Dicen los meteorólogos que hoy va a hacer fuertes vientos en algunos puntos y que mañana bajan bastante las temperaturas, que se hundirán por debajo de los ceros grados en muchas mínimas. Los detalles vamos a preguntárselos a Jorge Olcina a las once, tú prepara el jersey gordo y el abrigo anorak.

Nada nuevo en Venezuela, como no hay nada nuevo en Nicaragua o Cuba. Precisamente los dictadores cubano, Díaz Canel, y nicaragüense, Daniel Ortega, fueron los únicos mandatarios internacionales que acudieron ayer a la payasada de la toma del cargo por el perdedor de las elecciones venezolanas.

Nicolás Maduro, que ha accedido al poder por tercera vez consecutiva, al estilo de Putin, que envió un representante, flanqueado por su parlamento amañado y su ejército, sin presentar las actas electorales porque los comicios los ganó por goleada Edmundo González, que ahora está exiliado en España, en una astuta jugada en la que este hombre mayor, diplomático, profesor universitario y escritor, que pensaba disfrutar plácidamente de la jubilación, aceptó representar a la posición liderada por María Corina Machado. 

Precisamente a María Corina le impidieron presentarse a las elecciones. Lo que ha pasado ya lo sabes. Edmundo se comprometió a entrar en Caracas y tomar el cargo, la gente se echó a la calle encabezada por la muy valiente María Corina, que fue detenida brevemente, y al final Edmundo no pudo entrar, porque el tirano blindó las fronteras de Colombia y Brasil, y cerró militarme el espacio aéreo. La tiranía continúa y María Corina ha llamado en Instagram a continuar la lucha.

La pantomima de Maduro solo salió por las teles chavistas, los periodistas no pudieron transmitir y las calles se quedaron desiertas, más allá de los cuatro paniaguados del régimen que, a cambio de un picnic, fueron colocados delante de las pantallas desplegadas por las plazas. Un ruido en la cámara permitió a Maduro uno de sus chistecitos, para burlarse del verdadero presidente.

En declaraciones a la agencia EFE, Felipe González calificó lo ocurrido ayer de golpe de estado y vaticinó que el dictador chavista acabará como el recién depuesto presidente sirio, Bashar al Asad. En su opinión, tardará más o menos en caer, pero el régimen está acabado. González ha exigido al gobierno de Pedro Sánchez que encabece los movimientos europeos para devolver la soberanía al pueblo venezolano. 

Desgraciadamente, lo que nuestro gobierno ha promovido ha sido una declaración de la Unión Europea que da por inválidas las elecciones, pero no reconoce a Edmundo González como presidente, una posición de nadar y guardar la ropa. La postura es la que expresa nuestro ministro de Exteriores, que preguntado por el régimen de Venezuela, ha dicho que no es un experto para calificarlo. Pues si él no es experto... ya me dirás quién. A ver quién tiene que decir algo cuando se produce el desmán en Sudáfrica. A ver quién tiene que decir algo cuando pasa lo que pasa en Nicaragua.

En España hay 200.000 venezolanos, hay quién dice que se acercan al medio millón. Es una enorme población que equivale a la de Oviedo, Santa Cruz de Tenerife, Pamplona o Alcalá de Henares. Además, los españoles canarios configuran en Venezuela el movimiento migratorio más numeroso de nuestra inmigración. Al país se le conoce como la “octava isla” y, según el último censo, cerca de 70.000 canarios viven allí.

En España, el Gobierno de Pedro Sánchez ha elaborado una maniobra para interrumpir los procesos contra su mujer, su hermano y el fiscal general. La proposición de ley prohíbe las acusaciones populares. O sea, si yo quiero querellarme contra Begoña Gómez porque tuve que sacar el título de la Complutense para obtener una beca de investigación, y en cambio ella ha dirigido nada menos que una Cátedra sin tener el título, ya no voy a poder. 

Solo podrán denunciarla los afectados directos de sus enchufes. Los cambios legales se aplicarán a los procedimientos judiciales en marcha, de manera que ni Begoña, ni David, ni el fiscal general tendría nada que temer. Ayer declaró el hermano del presidente acerca del cargo creado para el en Extremadura y su trabajo, el que no ha sabido precisar si tenía o no despacho, quienes eran sus subordinados ni los que hacía.

También se prohíbe que los partidos políticos o el defensor del Pueblo ejerzan la acusación, al Gobierno no le gusta que las denuncias estén encabezadas por VOX, en cambio el PSOE protagonizó algunos de los principales movimientos contra los casos de corrupción de la trama Gürtel. Es un golpe contra la democracia que ha sido denunciado por las cuatro asociaciones de jueces que existen. Los magistrados condenan también el apartado que promueve la recusación de los jueces cuyas manifestaciones políticas no gusten al gobierno y que son una directa injerencia en la separación de poderes.

En la misma ley, que será aprobada por el procedimiento de urgencia y sin informe previo del consejo general del poder judicial, el consejo de estado ni el consejo fiscal, se mete de matute la supresión del delito contra las ofensas de los sentimientos religiosos. Dice el ministro Bolaños que “no pude haber delito en hacer humor”. O sea, a partir de ahora puedes entrar en las iglesias con los pechos desnudos o hacer mofa de las procesiones de Semana Santa.

De la cosa internacional no puede ignorarse hoy que Donald Trump ha sido condenado por pagar dinero y falsificar facturas para obligar a la actriz porno Stormy Daniels a guardar silencio sobre sus relaciones sexuales. El juez no ha impuesto multa ni pena, pero ha convertido al que será presidente de los EEUU en el primer convicto que accede al cargo.