España suspende en comprensión lectora
España es uno de los países de la UE donde más se estanca la comprensión lectora entre los 15 y los 17 años
Madrid - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
España es uno de los países de la UE donde más se estanca la comprensión lectora entre los 15 y los 17 años. Solo Grecia está peor que nosotros, no solo se estanca el aprendizaje sino que en España perdemos ese aprendizaje según la OCDE que ofreció ayer estos datos. La explicación está en tres factores, ellos ponen el foco en estos tres factores: uno, el abandono escolar muy temprano; dos, el número de jóvenes que ni trabajan ni estudian los famosos ‘nini’; y 3, la poca formación que ofrecen las empresas a los más jóvenes.
Tiene sentido, pero suponemos que tiene que haber algo más algo que explique cómo es posible que alguien que tiene una capacidad de comprensión lectora, por ejemplo, determinada a los 15 años la pierde con 27.
Por eso, en ‘Herrera en COPE’ hablamos con la profesora Beatriz Gómez-Baceiredo, doctora en Comunicación en la Universidad de Navarra, que nos explica que “según los datos del informe lo que señala es que no mejora, se ha quedado estancado esa comprensión lectora. Y tiene sentido, la verdad, porque si pensamos que cada vez se lee menos y que cada vez la capacidad de atención y de concentración es menor, en general, por muchas razones y se hace muy difícil. Es como músculo que si no se ejercita se puede ir perdiendo o se queda estancado, de verdad”.
Hoy día podemos hablar de distintas maneras de lectura según leamos en papel o en digital que hace que en este último se ofrezca una información más directa, con menos palabras para que la lectura sea más fácil. A este respecto, comenta la profesora que “al leer en digital se puede leer en un móvil, en un dispositivo, en ordenador, estamos acostumbrados -que no tiene por qué ser así porque se puede leer largo y con mucha atención en un dispositivo electrónico- como a pasar por encima. También creo que porque no sé yo, creo que tenemos un poco responsabilidad que asumimos que los jóvenes solo van a ser capaces de leer cosas cortas, como flashes de información y no les ofrecemos muchas veces un texto bien elaborado y bien escrito que le obligue a leer con más atención y estamos como alimentando esa rueda, como pensando que solo se va a leer de esa manera y yo creo que efectivamente hay información que se tiene que dar de manera muy rápida y muy visual y muy inmediata pero que también tiene que haber espacio para información también para los jóvenes y para la gente más pequeña que esté bien escrita, que implique una lectura sosegada y que tengan que entender esa lectura. Que tengan que hacer un esfuerzo”.
Señala Beatriz la importancia de crear un hábito de lectura en el entorno familiar “si en una casa hay libros, y eso está muy demostrado, si en una casa los padres leen, los hermanos, los abuelos…y no solo se elle sino que se habla de lo que se lee, si hay una discusión intelectual o hay temas de los que se discute y los que se debate, eso es positivo”.
“A los niños les encanta leer, el problema es cuando llega un momento en que pues no sé, el móvil y la vida social irrumpen en su vida y la vida es limitada y tienen las horas que tiene, con todo lo que tienen que hacer se abandona de lectura. Entonces o ven que alguien ahí sigue leyendo y dicen bueno algo interesante debe de tener, o si no es muy complicado retomarlo”, añade la profesora.
Lamenta Beatriz que hoy día se ha perdido la lectura, se la ha dejado de lado porque “parece que para que un niño sea competente y esté integrado en la sociedad tiene que dominar otras cosas, tiene que dominar la tecnología, tiene que saber moverse, efectivamente los conocimientos científicos, las matemáticas, el pensamiento más lógico… como que ha tenido más fuerza, y eso se ha dejado un poco de lado”. Y destaca que habría que “luchar y conseguir que se retome de vuelta, porque esa imagen de un joven con un libro es cada vez más rara”.
Como profesora de Universidad, defiende la lectura en todas y cada una de las aulas independientemente de la carrera que se estudie “se les ha machacado mucho que la lectura es algo utilitarista, tienes que leer un libro para rellenar una ficha en el colegio, para aprobar un examen y tienen lo que decía la utilidad de lo inútil. Hay que leer por el placer de leer, de comprender a los demás, de desarrollar la empatía, de comprender el mundo, de disfrutar por eso. Y en la Universidad es algo que a veces se nos da por sentado, los alumnos vienen ya con una edad, con una formación y estoy cada vez más convencida de que es ahora en la Universidad donde hay que volverlos a traer a la lectura porque es lo que va a hacer que desarrollen un pensamiento crítico, que piensen por ellos mismos y sean ciudadanos de pleno derecho y que puedan ejercer bien sea la profesión que desarrollen”.